Acampan en el hospital Posadas para reclamar por despidos

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Acampan en el hospital Posadas para reclamar por despidos

22 Mayo 2016

 

Por Daniel Kaminszczik

APU: ¿En qué consiste el acampe en el hospital Posadas?

Manu Molina: El conflicto empezó el 15 de marzo, cuando empezaron a llegar los telegramas que alcnzaron un número de 641 de todas las áreas del hospital. A partir de ahí nos empezamos a organizar todos los trabajadores despedidos, al principio con acompañamiento de los gremios –de ATE sobre todo- pero con el paso de los días ese acompañamiento se fue diluyendo, empezaron medio a boicotear la pelea y nos tuvimos que organizar de manera autónoma con apoyo del STS y la CICOP –que son dos gremios del hospital- y se implantó este acampe pidiendo la reincorporación de los 641 compañeros despedidos.

Esa pelea fue boicoteada por UPCN y ATE que cumplieron el rol de asustar a los compañeros y dijeron que había una mesa de negociación. En un momento pidieron que se levante el acampe y se levantó para que esa mesa se abriera a ver qué pasaba. Se había puesto un plazo, no hubo novedades, no aparecieron los dirigentes, el acampe de los trabajadores se implantó otra vez y hace dos meses y días que estamos acá, en el hall.

APU: ¿Hay alguna instancia de negociación en marcha con las nuevas autoridades del hospital?

MM: Las autoridades nos recibieron recién esta semana –el miércoles- porque tenían una reunión con uno de los gremios y éste nos invitó, no es que nos hayan invitado formalmente. Nosotros hicimos pedidos de audiencia, fuimos al tercer piso donde se encuentra la Dirección con un grupo de Diputados y Senadores nacionales y provinciales y no fuimos recibidos en ningún momento por los directores.

El primer director que llegó con la intervención, Alberto Díaz Legaspe, ahora se tomó una licencia de un mes por un problema de salud. Suponemos que él no va a volver, que van a poner a otro director, no sabemos si lo reemplazará alguno de los 6 directores actuales o si van a mandar a otro. La verdad es que todos los despidos y todas las decisiones que se están tomando en el hospital vienen directamente del Ministerio de Salud y de Modernización. El hospital está semi paralizado, tanto en el área de atención al público como las de mantenimiento, limpieza y seguridad que fueron las más afectadas por los despidos.

En cuanto a la reunión que tuvimos con el director, fue bastante escueta en cuanto a soluciones. No nos dio respuesta al reclamo de las reincorporaciones, sólo que están “viendo cuáles fueron las áreas más afectadas para empezar, de a poquito, a recuperar en esas áreas”, hicieron entrevistas pero dada la urgencia del caso, no lo están movilizando de la manera que debieran ya que el hospital está colapsado.

APU: Hace unos días pasaban por un canal de noticias una protesta del personal médico y paramédico del hospital en reclamo por el lamentable estado del hospital y del lamentable estado de sus salarios. ¿Hay algún tipo de coordinación entre el acampe y el personal en actividad en torno a todos estos temas?

MM: Está empezando a haberla. Acá hay una asociación de profesionales que es parte de la CICOP –un gremio provincial de profesionales de la salud- que venían acompañando y ahora les tocó a ellos. Ayer hicieron una asamblea en el hall reclamando cantidad de cosas. No estamos hablando de paritarias –nunca se habló de eso hasta el momento, recién ahora se va a empezar a pelear - pero estamos viendo también las complicaciones que están teniendo. La Dirección está comenzando a poner jefes y a hacer movimientos dentro de los sectores profesionales -por ejemplo en el área de cirugía- sin ningún consenso y eso es muy grave porque los médicos tienen su lógica, su organización, su consenso sobre quién es el más capacitado, el que puede manejar a todo el personal con un criterio común.

La dirigencia de la CICOP siempre estuvo acompañándonos, los médicos no tanto. Ellos medio estaban de acuerdo con esto de la reestructuración y de los despidos, no decían nada en contra pero tampoco se comprometían. Ahora cambió el panorama porque les está tocando a ellos. A medida que la gestión avanza, empieza a flexibilizar y a tocar otras áreas, comienzan a darse cuenta que les va llegando la hora a distintas personas del hospital.

Esperamos tener una unificación de criterios en esta pelea para darla con más fuerza. Sabíamos que esto iba a pasar, por eso estamos acá. Sabíamos que si no poníamos un freno y mostrábamos lo que estaba pasando iban a seguir avanzando. Creemos que si no hubiese estado este acampe hubiera habido más despidos. Por ahora lo que están haciendo es flexibilizar y tocar áreas sensibles del hospital, a los profesionales ya no les gusta y no sólo se están comprometiendo con su pelea sino que también nos dieron su solidaridad y ése es un avance importante.

APU: Ayer hubo incidentes en la puerta de la legislatura bonaerense por la ley de Emergencia y específicamente por uno de sus contenidos que refiere a la tercerización de los auxiliares de las escuelas. ¿Se percibe algún clima de ese tipo en lo que hace al Hospital Posadas?

MM: Sí, la tercerización también es una amenaza importante porque justamente, las dos áreas en que más despidos hubo, seguridad y limpieza, son las áreas favoritas para este tipo de prácticas ya que son las más fáciles para implementar una privatización. Ése fue siempre nuestro temor, la duda y la incertidumbre de no saber si vamos a ser reincorporados o una vez más, vamos a ser reemplazados por empresas porque sabemos que esas contrataciones siempre esconden un halo de oscuridad, de robo, de cosas raras, se manejan siempre en las sombras. No dicen: “Presentamos a tal compañía que va a prestar tal servicio con este personal...”, en general se realiza en las sombras. Por suerte por ahora no lo implementaron y no creo que lo hagan pero el temor siempre está, no sólo en este caso sino con todo el sistema de salud.

Acá estuvo Mario Róvere, un médico sanitarista con mucha trayectoria en salud pública y sistemas de salud, y él tiene también esa mirada. En Colombia por ejemplo hay Seguro de Salud directamente, no hay salud pública. Te dan un carnet y una cartilla como si fuese una obra social pero en realidad te lo está dando el estado y no se previene nada. Es como el seguro de un auto, esperan a que choques y si no chocás mejor, la plata la cobran igual.

Ese sería el extremo, uno espera que no lleguen hasta ahí pero con esta gente no se sabe porque están haciendo un desastre. Esos sistemas no están pensados en clave sanitarista, desde la prevención. Te quebraste una pierna, te cubro y hasta cierto punto porque tampoco está la posibilidad real de cubrir todas esas necesidades. Ni siquiera las tenemos hoy en este sistema, los servicios están colapsados porque no hay el apoyo que debiera haber.

APU: ¿Cómo sigue esto?

MM: Vamos a seguir aguantando acá todo lo que podamos, coordinando con otros espacios de lucha porque además se están abriendo focos en todos lados. Vamos a estar en permanente movilización con todas las otras actividades que se están generando, estuvimos en la marcha con los universitarios, creemos que todo lo público hay que defenderlo en conjunto, estuvimos en la marcha de las 5 centrales el 29 de abril y vamos a seguir movilizados con los que sí están dando la pelea –que son muchos y la están dando muy dignamente- y los que no, ya sabemos quiénes son, con quiénes no contamos, eso quedó claro. Espero que la gente, cuando elija nuevamente a sus representantes gremiales, tenga en cuenta a los que no estuvieron a la altura de las circunstancias y en función de eso poder construir algo más legítimo que pueda defender todos los derechos que se han adquirido, que se ha ganado con pelea, con lucha, con debate, con discusión y que no nos puedan bajar el piso al que hemos llegado. Que a esta gestión de Cambiemos con Macri y todo su séquito de cínicos –porque otro calificativo no les cabe- podamos ponerle un freno e inclusive revertir la situación en la que estamos.