"Un sector de la sociedad eligió a Macri para castigar cosas que no le gustan del kirchnerismo"

"Un sector de la sociedad eligió a Macri para castigar cosas que no le gustan del kirchnerismo"

29 Octubre 2015

Por Nicolás Adet Larcher

P: ¿Cómo observa el panorama que dejó las elecciones?

R: Hay un estado de estupefacción, pero pasó. Hay que saldar cuales fueron las razones, por ejemplo en provincia de Buenos Aires, la gobernadora electa fue de Cambiemos. Ahí estamos en presencia de un escenario complejo para todos los que entendemos la democratización de la sociedad que se dio en la Argentina en muchos niveles en el social, cultural, económico, federal. Estamos en un momento donde se definen dos modelos, uno vinculado a las políticas públicas de los últimos años y otro que claramente es el retorno del neoliberalismo en Argentina, con la memoria histórica que tenemos respecto al neoliberalismo en nuestro país, cuáles fueron  sus consecuencias tanto para las economías regionales, para la soberanía tecnológica y científica o la soberanía financiera del país. Todo vinculado a cosas muy concretas, el trabajo, la producción, la creación del empleo, todo adoptando políticas que no eran neoliberales en el último tiempo.

P: ¿Qué reflexión le genera Cambiemos, un espacio de derecha con impronta en las urnas?

R: Estamos hablando de una derecha neoliberal moderna, o que se presenta como moderna al estilo Piñera en Chile o lo que pasa a veces en Colombia que son tipos ubicados en la derecha, pero cuando los escuchás hablar no sabés si ubicarlos en el espectro progresista o en el conservador. Porque mientras no haya políticas que compliquen la acumulación de capital de los sectores dominantes de la sociedad, no tienen empacho en apoyarla, no es la derecha de Videla, es una derecha nueva que trata de llevar adelante políticas de acumulación de capital para su propio beneficio, para sus privilegios y que evita que choquen con otros intereses de la sociedad que tienen que ver con la evolución. Por ejemplo, el matrimonio igualitario, pueden decidir no confrontarlo.

P: Respecto a lo sucedido en la provincia de Buenos Aires, ¿Cuál es tu lectura al respecto?

R: La provincia tiene grados de complejidad para ser analizada porque tiene comportamientos distintos, el sector rural es uno, el comportamiento en el tercer cordón es otro y el comportamiento en todo el cordón primero vinculado a la Capital Federal también es otro. Como baluarte del peronismo histórico, la provincia había sido recuperada por Antonio Cafiero y siempre había sido un bastión. Me parece que lo que paso es un trabajo muy puntual de los grupos monopólicos de la comunicación contra un candidato (Aníbal Fernández), tratando de dañar y lastimar las posibilidades del conjunto del FPV en la provincia y que ha sido exitoso. Es la primera vez que sucede, habitualmente el candidato a presidente tracciona y eleva a los votos del gobernador, pero esta vez no sucedió, hubo mucho corte de boleta para dañar al FPV.

No olvidemos que esta operatoria le otorgó la posibilidad a María Eugenia Vidal de otorgarle cuatro puntos porcentuales a Mauricio Macri a nivel nacional. Ahí está una parte de la explicación de cómo opera la derecha y los sectores económicos concentrados. Después, obviamente, sectores de la sociedad han evidenciado algún tipo de cansancio. Sectores a los que el oficialismo ha dejado de hablarles en su momento o por lo menos no ha llegado con su discurso y vuelvo a poner como eje la cuestión de la concentración de medios. La concentración en sectores urbanos o periurbanos es terrible, lugares como Rosario, Santa Fe, Córdoba, hablando de medios opositores.

P: Se hicieron muchos análisis respecto al desarrollo de la campaña de los candidatos, en particular del discurso de Macri y de Scioli. Por un lado, hay que preguntarse qué impacto puede haber tenido el cambio de estrategia de Macri para reconocer logros del kirchnerismo y por otro lado, tener en cuenta si Scioli tuvo discurso propio o se mantuvo entre el kirchnerismo y una suerte de sciolismo.

R: Creo que hay un poco de todo, me parece que el caso de Macri fue una estrategia de marketing muy eficaz, con el apoyo de los medios y también tuvo una virtud, Macri no se enamoró del Macri de hace diez años, evolucionó en la forma de presentarse, de hablar. Cuando se dio cuenta que hablar bien de la AUH, de YPF o Aerolíneas estatal lo iba a ayudar cosechar votos, lo hizo, fue muy desprejuiciado. Creo que un sector de la sociedad lo eligió para castigar cosas que no le gustan del kirchnerismo y entre las cosas para citar, las mismas están dadas por la agenda que se armó desde los grupos monopólicos de comunicación, esto de que el kirchnerismo es arrogante, soberbio, que discute con todo el mundo, que no deja opinar a los demás, es evidente que eso ha calado en algún sector.

En cuanto a Scioli, debe aceptar que es el candidato de un proyecto que tiene características muy importantes para un montón de gente. Recordemos que el FPV ganó la elección y lo votaron más de 9 millones de personas, ha ganado la elección en la mayoría de las provincias, sigue siendo una herramienta indispensable de los sectores populares, de los sectores de clase media, de industria, es muy importante. En estos años ha tenido un gran valor, yo creo que Daniel Scioli expresa eso pero debería hacerlo con más energía, está claro que lo que ha logrado cosechar está vinculado a lo que se construyó en estos últimos años.

Si yo fuera asesor de Daniel Scioli le diría que su discurso no debe ser ni kirchnerista ni sciolista, debe ser un discurso honesto y sincero a comparación de un discurso marketinero y mentiroso como el de Macri. Para ser sincero se debe hablarle a la gente sobre las cosas que se obtuvieron y también sobre las cosas que han faltado, que se deben corregir e interpretar que hay un sector agotado por la forma en que le han hablado hasta ahora. Se debe enfocar la cuestión desde otro sentido.