"La historia no se esconde por más que le llamen relato”
En un discurso pronunciado en uno de los patios internos de Casa de Gobierno, tras finalizar el acto por el 32 aniversario de la Gesta de Malvinas, Cristina recomendó "estudiar historia e indagar sobre relaciones de poder en el mundo para impedir que al pueblo argentino lo lleven de las narices".
Enfatizó que "es muy importante que empecemos a conocer nuestra historia, pero que sepamos que también estuvo determinada por las relaciones internacionales". "Esta debe ser una tarea en la que deben estar comprometidos los argentinos de todas las tendencias políticas", señaló la mandataria. Y al respecto, agregó: "Tenemos que saber. Al que no sabe, al que no estudia, se lo llevan de las narices".
En ese sentido, la Presidenta recordó la reunión que jóvenes de distintas agrupaciones políticas mantuvieron con el titular de la Sedronar, el sacerdote Juan Carlos Molina, y que constituyó el origen del programa "Recuperar Inclusión", anunciado el lunes pasado.
"El trabajo de los jóvenes es muy importante en la tarea de inclusión y el otro día lo decíamos en la reunión con el padre Juan Carlos. Por eso, los responsables de las distintas agrupaciones tienen que armar institutos, centros de formación para poder manejar mejor la información", afirmó.
En otro orden, la mandataria consideró que para construir una economía desarrollada "no significa que haya que aislar a Argentina del mundo". "No hay que aislarse del mundo, pero relacionarnos con inteligencia. El ejemplo es YPF, que hoy es la empresa argentina con la mayor oferta de acciones. La recuperamos y con ella vamos a adquirir otra vez el autoabastecimiento de petróleo", fundamentó.
Cristina aseguró además que la democracia es "el reaseguro" para garantizar la continuidad del proyecto de inclusión iniciado en 2003, y reivindicó al peronismo como movimiento democrático.
"La democracia es el reaseguro para poder garantizar la continuidad del proyecto de inclusión y mejorar la calidad de vida de nuestra gente. El peronismo es un gran movimiento nacional popular que también involucra a otras fuerzas políticas", sostuvo.
La presidenta consideró que el gobierno iniciado por el ex presidente Néstor Kirchner en 2003 ha "deconstruido cada uno de los mitos sobre el peronismo", en cuanto a que al justicialismo no le gustaban "la educación ni los científicos".
"Sin embargo, fuimos nosotros los que levantamos las huelgas docentes, cuando se les pagaba con papelitos, y los que inauguramos el Ministerio de Ciencia y Tecnología", consignó. Al mismo tiempo, mencionó que "con este gobierno" también se retomó la politica de "reindustrialización" del país y se trabajó en mejorar la calidad de vida de la gente.
"La historia no se esconde, por más que le llamen relato es historia, es historia de derechos, es historia de conquistas, es historia de logros, es historia", concluyó Cristina.
Discurso Patio de los Patriotas Latinoamericanos
Mis queridos jóvenes: ustedes tienen que dedicarse a ser compositores…es impresionante. La verdad que, una cosa que quiero pedirles a todos los jóvenes, a todas las organizaciones políticas, no solamente las que son de nuestro movimiento político que nos acompañan, otras que vienen de otras historias, otras experiencias pero que integran este espacio plural, democrático que se identifica con las grandes banderas, quiero pedirles algo, muy especial, yo sé que están trabajando mucho en la formación de cuadros, que están trabajando mucho en la preparación de institutos, que hablan mucho de los jóvenes, ahora están participando muy activamente con jóvenes como estuvimos el otro día con el padre Juan Carlos en la recuperación de adicciones, pero hay algo sí, esto es muy importante que quiero decirles, pero necesitamos también que los distintos dirigentes responsables de las organizaciones, también organicen cursos de formación sobre política internacional, sobre historia internacional, porque en serio, necesitamos que…..
Ustedes vieron una cosa, no sé si se dieron cuenta, ¿no?… No se dieron cuenta pero mañana van a decir que critiqué a los medios y qué se yo, pero ustedes se dieron cuenta que prácticamente, salvo cuestiones catastróficas o muy evidentes, parece como que la Argentina fuera un planeta solo en el mundo, que no existiera, porque no hay una sola noticia internacional de nada, de las económicas ni hablemos.
Por ejemplo, no te cuentan que España está con una deuda de 300 por ciento de su PBI, 200 por ciento la parte privada y 100 por ciento el Estado, que en los jóvenes la desocupación está en el orden del 40 por ciento. Bueno…en fin.
Pero es muy importante y yo me doy cuenta cuando charlo en un mano a mano y en muchas cosas, que es necesario que empecemos también no solamente a conocer nuestra historia que es fundamental, porque esa historia también estuvo determinada por la historia internacional. Que tengamos algún instituto en las distintas agrupaciones….ya sé, mañana “maestra ciruela, los quiere hacer estudiar”.
Y sí, tenemos que prepararnos, tenemos que saber, porque el que no sabe, al que no sabe…chicos…al que no sabe, al que no estudia, al que no sabe lo que pasa y cómo se fueron produciendo los acontecimientos, los llevan de la nariz. Sobre todo, en un mundo, donde los medios, no solamente acá, sino en todas partes, los medios de comunicación y, fundamentalmente también, las redes sociales han adquirido una gran importancia, el problema es la selectividad de la información.
A nosotros, nadie nos seleccionaba lo teníamos que leer; a Mariano Moreno tampoco, está claro, porque si no…Es más, leían libros que estaban prohibidos acá, nadie les contaba lo que pasaba, tenían que enterarse ellos lo que pasaba en Francia, en la Revolución Francesa, etcétera, etcétera. Si no se hubieran enterado de eso, no hubiera habido Mariano Morenos, no hubiera habido Belgranos, no hubiera habido Monteagudos, French y Beruti, etcétera, etcétera.
Por eso es importante, y yo me doy cuenta sobre todo en esta experiencia que nosotros tenemos con nuestras Islas Malvinas, la necesidad de conocer a fondo la historia y conocer a fondo también la política internacional que se rige, por lo que decía hace unos instantes recién, por la relación de fuerzas.
Por eso, construir un país con independencia económica, que no significa no tener relaciones con el mundo, al contrario. Lo que ayer nos pasó con YPF que pudimos salir al mundo y tener la mayor oferta que registra una empresa argentina, como ahora es YPF recuperada, y que para mí constituye un orgullo, porque nos va a permitir el autoabastecimiento energético.
Entonces, es muy importante construir conocimiento, es importante construir importancia e independencia económica, energética, pero fundamentalmente siempre las cosas han cambiado primero desde las ideas para luego influir en la política y en la economía.
Por eso, es importante el conocimiento, saber. Y que además, ese saber, ese conocimiento, esa información no te la procese nadie, la puedas leer vos como argentino de los intereses de tu país…
Una colombiana, patria grande, una colombiana, gracias mi amor. México….hay estudiantes, chicos, tenemos estudiantes de distintos países de Latinoamérica que hoy están acompañándonos acá. ¡Maravilloso! Gracias, gracias Colombia, gracias México.
La verdad, ¡qué contento que estaría Hugo si los escuchaba cantar esta consigna! La verdad que fueron demasiadas pérdidas en tan poco tiempo. Pero, ¿saben qué? Esos hombres no se pierden. Esos hombres vuelven hecho historia y ejemplo para todas las generaciones. No los pueden borrar, no los pueden ocultar.
Digo que esos hombres y esas mujeres vuelven hechos ejemplos e historia para estas generaciones y todavía para las futuras, mucho más de los que algunos se imaginan. Y si no, miren ese cuadro de esa mujer de la que creyeron que habían borrado de la historia. Esa mujer que prohibieron su nombre, que violaron, que ocultaron, que violentaron su cadáver y que la tuvieron escondida; escondido un cadáver como si pudieran esconder la historia.
La historia no se esconde, por más que le llamen relato es historia, es historia de derechos, es historia de conquistas, es historia de logros, es historia. Por eso, compañeros, compañeras, queridos: tengo que ir al patio de Las Palmeras todavía que hay otro grupete. Recién cuando venía, bajaba del estrado, porque tengo que hablar sentada por la pata, me paró Hebe y me dijo: “No, no te equivoques –me dice-, nuestros hijos están ahí con todos tus pibes”. Ustedes son. Gracias, muchas gracias.
Discurso Patio de las Palmeras
Quiero agradecerles la presencia multitudinaria de todos ustedes, hoy aquí, acompañándonos a todos los argentinos en un día muy especial, en un día que nos producen sensaciones ambivalentes, contradictorias por todo lo que vivimos.
Yo quiero contarles algo que no conté. Me voy acordando a medida que voy hablando. A medida que voy hablando me voy acordando de cosas. Quiero contarles una anécdota que tiene que ver con Malvinas y que tiene que ver con la historia en general.
La última vez, antes del golpe del 24 de marzo de 1976, que estuve en la Plaza, fue el 17 de octubre del año 74. Perón había muerto el 1° de julio y me acuerdo, yo ya salía con Néstor. En realidad no estábamos saliendo todavía, estábamos ahí, me estaba….como decíamos en aquella época, me estaba arrastrando el ala pero todavía no pasaba nada.
Entonces, se venía el 17 de octubre, el primer 17 de octubre sin Perón, porque, claro, había habido varios 17 de octubre sin Perón en la patria, pero con Perón en España, mandando mensajes, cartas, con Perón vivo, era otra cosa. Yo sostenía que había que ir a La Plata. Néstor que andaba medio enojado con lo que pasaba, decía: Yo a La Plata no voy.
Bueno, le digo, yo voy. Ese día se había decretado o se iba a decretar la nacionalización de las bocas de los expendedores, y entonces estábamos discutiendo en la estación de trenes de La Plata, que vamos, que no, que yo sí….Bueno, mirá, si vos no querés ir no vayas, yo voy. Me subí al tren y fuimos.
Bueno, ahí fuimos con el tren. Ese día los trenes eran gratis, llegamos a Constitución, nos fuimos a la Plaza caminando, empezamos a recorrerla. Me acuerdo que nos encontramos con un grupo de compañeros, uno de ellos es hoy Diputado nacional, se debe acordar, no sé si estará hoy por ahí o estará en 3 Arroyos, Justo Moreno, nos encontramos ahí en la Plaza y esa vez fue la última vez que fui a la Plaza de Mayo en esa etapa, 17 de octubre de 1974.
¿Y cuándo volví? Esa es la gran pregunta. Por esas cosas de la vida en junio del 82 yo estaba aquí en Buenos Aires, y el 14 de junio, el día de la rendición de la caída de Puerto Argentino, yo estaba en La Plata, con mi mamá y con el nene, le dejé a Máximo, a su amigo Máximo, se lo dejé a mi mamá, a la abuela para que lo cuidara como hacen todas las mamás. A esa altura mi mamá o mi suegra cuidaban al nene. Me tenía que venir a Buenos Aires, me tenía que venir por cuestiones administrativas.
Miren ustedes cómo es el manejo de la información. Creo que vine en un Río de la Plata desde La Plata. Cuando salí estaba todo normal. Cuando llegué acá y tomé un taxi en Constitución para ir hasta el estudio de un amigo mío que quedaba cerca por acá, de Plaza de Mayo, ya se había rendido y se había caído Puerto Argentino o estaba a punto de caer, ahora que me acuerdo.
Llego al estudio de mi amigo y ahí comienzan a decir que se había rendido Puerto Argentino. Seguimos charlando y al rato viene la secretaria y me dice: está empezando a ir gente a la Plaza.
¡Ah! Dije, yo me voy a la Plaza. Largué todo y me vine; serían las 3 ó 4 de la tarde, no más. Había un pequeño grupo que se ve que eran militantes bien organizados en el centro, que era el que largaba las consignas, y cada vez que aparecían los medios de comunicación, en aquel entonces eran todos estatales, pero aparecían los medios y se tiraban monedas, los insultaban, quemaban diarios. Yo vi quemar La Razón. Agarraban los diarios y los quemaban, porque se habían sentido estafados y engañados.
Y se empezó a amontonar cada vez más gente, más gente obviamente, a eso de las 6 de la tarde, que es la salida de las oficinas, estaba la Plaza repleta de bote a bote. Había colgado al principio, frente a la Casa de Gobierno en uno de los balcones, esas alfombritas rojas como que alguien iba a hablar, por ahí se asomaba algún militar y cada vez que se asomaba era una rechifla generalizada impresionante.
Yo decía, quién será el loco que se va a animar a salir a ese balcón. No salió nadie, por supuesto. A las 6 de la tarde la Plaza estaba repleta de hombres, mujeres, mujeres con chicos que los habían ido a buscar al colegio, oficinistas, yo me encontré con algunos amigos y compañeros allí en la Plaza, y esa vez fue la vez que volví a la Plaza, el 14 de junio de 1982.
Luego, dieron la orden de que la Plaza fuera desalojada, porque las consignas eran cada vez más fuertes, más duras y como la gente cada vez se reunía más, y más, y más…hubo represión y tuvimos que correr porque empezaban a lanzar gases y demás.
Pero fíjense las cosas. La última vez fue un 17 de octubre y la primera vez fue el 14 de junio de 1982. La historia se va enlazando, y uno aprende de la historia. No hay mejor aprendizaje, no hay mejor formación para un político que haber vivido o haber sido parte de la historia. Hay cosas que no se aprenden en los libros, no te las enseña ni te las replica nadie, las vivís de la experiencia personal, y la verdad que recuerdo ese día que después terminamos en la 9 de Julio, llorando, con pañuelos en la boca, porque hay que ponerse enseguida pañuelos en la boca…bueno…
Bueno, y así vino inmediatamente la apertura política; el 1° de julio se levantó la veda, porque estaba prohibido hacer política en la Argentina; prohibido.
Por eso, cuando yo escucho algunas voces que dicen o que quieren confundir a la gente de que hay autoritarismo, por Dios, en la Argentina estuvo prohibido hacer política, no decir soy esto, soy lo otro, estaba prohibido. Se levantó la veda el 1° de julio y se convocó, obviamente se podía afiliar.
Me acuerdo que nos íbamos a afiliar enseguida con Néstor y mi primer acto político militante que me causó un accidente terrible automovilístico, fue unos días antes del 26 de julio, porque estábamos haciendo una pegatina por la misa de Evita en Río Gallegos. Veníamos a la madrugada, habíamos salido un grupo muy grande a hacer pegatina, y fuimos a hacer después un operativo de seguridad, contar que estuvieran todos los que habíamos salido y llevando una compañía en el auto, y me acuerdo que me di la piña con el auto en Gallegos, resbalé en la helada y me di una piña. Así que la primera piña también que me dio el auto y casi me mato, fue también militando. Así que mirá las cosas que te enseña la militancia política y de experiencia.
Bueno, nada, contarles que las cosas no se construyen ni en 1, ni en 2, ni en 3 días. Es más, esas son las que menos duran. Las cosas que más perduran son las cosas que se construyen con historia, con perseverancia, con acciones, con militancia, y también, por qué no, con mucho coraje para decir que no cuando hay que decir que no y también atreverse a hacer aunque sea uno sólo a decir que no, también atreverse aunque sea uno sólo a decir que no. Sobre todo, en épocas de encuestas donde vos no sabés lo que opina un político, porque seguramente se reunió antes con su asesor de imagen, para que le digan qué es lo que tenía que decir.
Bueno, yo no soy de esa generación. Soy de la generación, yo soy de la generación y de la escuela de los que dicen lo que piensan, lo que creen y lo que creen que les va a hacer bien a la patria y el país.
Por eso, te da mucha tranquilidad de conciencia, de poder mirar a los ojos de todos los argentinos y decirles que nunca le prometimos nada. Es más, nunca le prometimos nada y dimos cosas que nunca nadie imaginó que iban a pasar en la República Argentina.
Por eso, la construcción….Me pregunto…y hay ejemplos para dar. Si uno miraba las encuestas allá por el año 2003, cuando él se lanzó a esa quimera de gobernar la Argentina, los derechos humanos creo que no figuraban en ninguna encuesta. Sin embargo, allí estuvimos con la bandera de Verdad, Memoria y Justicia.
Cuando decidimos retomar la política de la industrialización del país, a fondo, cuando decidimos que la educación iba a ser lo más importante. Fíjense que nunca nos vincularon al peronismo con la educación. Al contrario, parece que los argentinos con aquel viejo mito de alpargatas sí, libros no, nos habían relegado la educación y parecía que a los peronistas no nos importaba la educación, que los que tenían la educación o los dueños de la educación.
Sin embargo, fuimos nosotros los que levantamos todas las huelgas docentes que se pagaban con papelitos y pusimos a la educación argentina, sus universidades, a sus científicos en un lugar en donde nunca estuvieron.
Fíjense, donde siempre estaba ese mito de que al peronismo no le importaban los científicos, fue precisamente el gobierno que comenzó en el año 2003, y luego cuando inauguramos el Ministerio de Ciencia y Tecnología, el otro día cuando me entrevistaba con Rabinovich y me trajo esa foto maravillosa de él con Néstor hace 10 años no lo podía creer.
Por eso, creo que hemos reconstruido cada uno de los mitos no sobre Néstor o Cristina, sino sobre un movimiento político y social que hoy excede al peronismo, que involucra también a otras fuerzas políticas, a otras identidades históricas y que yo definiría como el gran movimiento nacional, popular y democrático.
Y sí agradecerme, como lo hice en el Congreso, la recuperación de la democracia como un valor muy importante que nosotros por distintas experiencias históricas que las puedo explicar también. No creíamos, claro, en la democracia, teníamos razones para no hacerlo. Nos habían tirado abajo cuando bombardearon esta Casa de Gobierno en el 55, nos habían tirado abajo el nivel de democracia cuando proscriptos durante 18 años.
O sea, teníamos razones para no creer en la democracia. Pero una vez que entendimos, porque no somos tan brutos como piensan, somos inteligentes. Una vez que entendimos que la democracia era el reaseguro para poder garantizar esa continuidad de ese proyecto de inclusión en educación, en trabajo, en universidad, en científicos, en fábricas, en consumo, en capacidad, en viviendas, en mejorar la calidad de vida de nuestra gente, también lo incorporamos. Por eso, hoy somos algo más que lo que éramos. Fuimos sumando.
Y eso es, de eso se trata la política, de ir sumando todo lo positivo y lo que equivocamos rectificarlo. Y bueno…también equivocarse es aprendizaje. Es imposible no equivocarse. Así que nada, agradecerles. Gracias, muchas gracias por estar acá. Gracias por este….cuiden el Patio de Las Palmeras que lo estamos reconstruyendo. Miren todas las pinturas que estaban cubiertas desde hace más de un siglo.
Estoy poniendo esta Casa de Gobierno porque es el símbolo del pueblo para que los disfruten todos los argentinos, porque es el fenómeno cultural de los argentinos. Esto es parte del patrimonio cultural de los argentinos. En realidad, yo les agradezco infinitamente el amor, el amor de todos estos años y estoy absolutamente convencida de que hemos sembrado en tierra fértil. Muchas gracias, muchas gracias a todos y a todas. Los quiero mucho. Acá dentro del corazón para siempre. Gracias.