Volver a Perón (y a la Historia)

  • Imagen
    Cincuenta años sin Perón.
    Juan Domingo Perón
PERÓN INMORTAL

Volver a Perón (y a la Historia)

01 Julio 2025

Hace 53 años, regresaba Perón a la Argentina. En una reunión en lo de “Nino”, un restaurante en Vicente López llevó a cabo unas palabras que deberían haber sido memorables. Pero aquel “ultimo Perón” (el del “Modelo argentino”) quedó perdido en el ostracismo de los tiempos posmodernos.

Allí Perón, en lo de Nino, brindó unas palabras sumamente categóricas. Por su contenido no sólo estratégico, sino de carácter moral, ontológico, parecía más bien un sermón.

El demo-liberalismo-burgués que durante dos siglos ha manejado al mundo, en su implantación le costó a Europa 20 años de guerra. En esos 20 años de guerra se realizó el cambio y durante dos siglos el sistema demo-liberal-burgués ha manejado al mundo.

Lo ha manejado con sus empresas, con sus máquinas, ha hecho evolucionar al mundo en lo técnico y en lo científico más que en los diez siglos precedentes. Eso no lo podemos negar.

Pero tampoco podernos negar que ese sistema se ha realizado sobre las espaldas y los sacrificios de los pueblos. Pero esos mismos medios técnicos y científicos, han dispersado la información masiva por el mundo y simultáneamente, han esclarecido a los pueblos.

Hoy, el último paisano a cientos o miles de kilómetros de las metrópolis, tiene su transistor en la oreja con el cual está viviendo lo que pasa en el mundo en ese momento. Es esto lo que ha terminado por esclarecer a los pueblos y hoy los pueblos no quieren ya el sacrificio”.

Anterior a dicha excursión, Perón advertía

Es indudable que el mundo actual está influenciado por una evolución histórica fuera de lo común. Estamos en un momento de cambio, en los sistemas y esquemas, tanto políticos, como sociales y económicos. Es indudable que esas etapas sean etapas de lucha, de discusión y algunas veces de pelea”.

El valor de un sermón refiere a una lección de humanidad. No importa cuando leas esto. La enseñanza de Perón en la praxis y en la oratoria lo muestran como un actor clave de nuestra Historia y nuestra Patria.

Cuando regresó al país, luego de un largo exilio, lo hizo con una misiva, con vistas de dejarnos un testamento político. Aquel legado fue el “Modelo Argentino”, curiosamente uno de los textos menos considerados.

Lo que no es curioso es el proceso de deshistorización que sufrió su figura a partir de la denominada recuperación de la democracia a principios de los 80. Allí Perón quedará preso de la dialéctica “autoritarismo/democracia” socialdemócrata que instalaba al “tercer Perón” o como un líder senil y manipulado por la derecha o, por el contrario, como el principal instigador de aquellas fuerzas parapoliciales que inauguraban una época plena de caos y violencia. De lado quedaría su programa de gobierno, su intención de fortalecer al Movimiento y preparar a nuestro país para una nueva que se avecinaba. Como un estadista notable supo entender sagazmente que en los setenta se estaba dando fin a una era y que resultaba inminente la llegada de una nueva en donde los países periféricos deberían luchar por el saqueo de sus recursos, por la disputa de un nuevo sentido común donde el humanismo era postergado por una cultura de consumo voraz e irracional. No, Perón no era Nostradamus. Fue claro, sin rodeos. Siempre apelando a construir una nueva episteme que nos libere de la colonización pedagógica.

Sigamos leyendo, las palabras del líder en lo de Nino:

¿Qué pasará en el siglo veintiuno, que al comenzar en su año 2000 es probable que tenga de siete a ocho mil millones de habitantes? Ya no podemos pensar con el pequeño concepto de naciones, ya debemos empezar a pensar en la tierra que es la que nos comprende, nos alimenta y nos sostiene a todos.

Y si esa evolución ha de producirse es indispensable que nuestras comunidades vayan también adaptándose a esa necesidad y vayamos evolucionando en lo económico, en lo social y en lo político, para poder enfrentar el terrible problema que, como asechanza, nos está esperando en el año dos mil.

La evolución de la humanidad que comenzó con el hombre aislado, siguió a la familia, a la tribu, al clan, al estado primitivo, a la ciudad, al estado feudal, a la nacionalidad, hoy ha llegado a los continentes y si los continentes se integran y se unen para defenderse contra la grave amenaza que se cierne sobre la humanidad, ¿cómo podemos pensar que los países que aún subsisten no han de defenderse en una mancomunidad absoluta y en una colaboración permanente?”

Hoy, en un nuevo aniversario de su partida, resulta indispensable recuperar a Perón en su pensamiento, en su obra y su historicidad. Curiosamente hoy también es considerado el día del Historiador en la Argentina: tanto la revisión sobre Perón como sobre la función pedagógica de la Historia son elementos notorios para contrarrestar esta nueva época de oscurantismo, de repliegue sobre la comunidad nacional, de avasallamiento sobre nuestros derechos sociales. No es casual que la Historia y el legado de Perón sean los principales enemigos del gobierno libertario.