El Grupo Alejandría celebra sus primeros 15 años

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El Grupo Alejandría celebra sus primeros 15 años

07 Abril 2019

Por Claudia Sobico

La fiesta

Miércoles 10 de abril en el Centro Cultural Matienzo (Pringles 1249, CABA) a las 20.00hs.

AGENCIA PACO URONDO: Contanos sobre el evento.

Jimena Rodríguez: Promete ser una noche hermosa. La verdad es que estamos súper contentos y agradecidos de contar con la presencia de distintos ciclos de lectura y la posibilidad de reunir los ciclos nuevos con los clásicos. Contaremos con la presencia de Gilda Manso, de Los Fantásticos, Pamela Terlizzi Prina, de Siga al Conejo Blanco, Cecilia Szperling, de Confesionario y Mauricio Koch, de Bienvenido Bob, entre otros. Además viene Ana María Shua, que es la primera escritora que vino a leer a Alejandría y Mauricio Kartun, que siempre es muy generoso con nosotros y nos acompaña cada vez que lo convocamos para un proyecto o una fecha especial.

APU: ¿Cómo viene la previa?

JR: A full. Venimos pensando cómo celebrar los 15 años desde el año pasado. Teníamos varias ideas pero lo cierto es que la crisis que está atravesando el país nos apretó más de lo que esperábamos. Igual confiamos en que vamos a poder ir haciendo todo lo que queremos. Siempre fue así. Quizá nos lleve un poco más de tiempo pero siempre de alguna manera lo sacamos adelante.

APU: El Grupo Alejandría se caracteriza por la diversidad de propuestas que ofrece y porque siempre están pensando nuevas ideas. ¿Cuál es la sorpresa?

JR: Sorpresa editorial tenemos. A nuestra feria de libros, además de la editorial amiga, La Coop, se sumarán Imprenta Rescate, Indómita Luz y Peces de Ciudad. Y tenemos anuncios también de lo que vendrá.

APU: ¿Cómo surge el nombre del grupo?

JR: El nombre de Alejandría viene porque los fundadores, que eran compañeros en el taller de Abelardo Castillo, estaban leyendo "El cuarteto de Alejandría" de Durrell.

La historia de vida

(Sigo el relato y me imagino el video reflejado en una pared del salón. Algunas fotos están escaneadas)

Grupo Alejandría nace hace 15 años de la manera más sincera que un grupo puede nacer: la sobremesa, la charla interminable, siempre una birra más hasta lograr un giro, un algo que sacara a la escritura del acto solitario. Eso los unía a Edgardo Scott, Juan José Burzi, Verónica Yattah, Sandra de Falco, Clara Anich y Leonardo Saguerela, quienes se juntaban post taller de Abelardo Castillo a pensar proyectos de trabajo conjunto. No querían que fuese una revista, algo más para leer en soledad. Entonces el deseo se materializó en un ciclo de lectura. Comenzaron a organizar lecturas en vivo, un formato parecido a lo que veían en ciclos de poesía, pero adaptado a la narrativa. Y trabajaron mucho. Imprimían papelitos con la info de lectoras y lectores y volanteaban Corrientes a pie. El evento transcurría cada quince días en el bar Bartolomeo del Pasaje de la Piedad y recibían, como público, desde escritores a estudiantes de letras y algún que otro curioso. Fueron creciendo, pasaron los años, la frecuencia bajó y los integrantes rotaron. Se sumaron Xim Venturini, Nicolás Hochman y Paula Casal, y de alguna manera Alejandría se volvió lo que es hoy, un espacio que trasciende a quienes lo conforman.

El Grupo Alejandría se compone actualmente por tres integrantes: Clara Anich, narradora, dramaturga, coordinadora de talleres y directora de KiakoAnich; Yair Magrino, poeta y editor en Clubcinco Editores y Soeojchi Editores; y Jimena Rodríguez, guionista y coordinadora de talleres. Todos ellos gestores culturales, además, por el mero hecho de querer compartir ese placer que les da la literatura, como cuando compartimos un vino, una canción o un rico plato. Esa fibra hace que no paren de generar ideas y diferentes espacios para el disfrute y también la reflexión sobre la palabra.

El álbum de fotos

(Lo miro curiosa, me detengo en cada página)

Sus actividades a lo largo de los años son muy diversas: La publicación de varias antologías y un audio-libro; la participación en la Noche de librerías 2007 y 2012; la organización del Cierre de Ciclos de Lecturas, que incluyó la participación de más de treinta ciclos literarios de Capital Federal (2008); la participación en distintas ferias del libro (Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, FLIA, Quilmes, San Martín); la participación en otros ciclos literarios o de lecturas (Los mudos, Nueva narrativa argentina, Muh, Viajera, Naranja-Verde, Besares, Los Fantásticos, Traspapelados, Casa de Letras, etcétera); y la organización de mesas debate, talleres de lectura, clínicas de escritura, y una muestra interactiva sobre literatura digital.

Además recibieron el reconocimiento y el apoyo del Fondo Nacional de las Artes en 2007, y el Mecenazgo de la Ciudad en 2011, 2013, 2014 y 2015.

En estos últimos años Alejandría comenzó a organizar concursos de narrativa: el Premio Alejandría de Cuento Breve en 2011; el Premio Itaú de Cuento Digital desde 2012 al 2014; y el Premio Grupo Alejandría en 140 caracteres, un concurso de microficción en Twitter en el 2015.

En 2016 decidieron encarar una nueva etapa e iniciaron al proyecto “Mapa Literario”, un proyecto que busca visibilizar escritores a nivel federal y regional. Para ello, se abrieron convocatorias en distintos puntos: Gualeguaychú, Las Flores y Pergamino, en el 2016; y Junín, Mar del Plata y 9 de Julio en el 2017, y se organizaron encuentros de lectura donde participaron el seleccionado de la zona, más escritores locales, y escritor de trayectoria de CABA más los integrantes del grupo. En el 2018, el grupo realizó lecturas en Montevideo, Uruguay, y en Santiago de Chile; además de haber convocado a escritores de Tierra del Fuego, Córdoba y San Luis, entre otros.

El regalo

APU: ¿Ya recibieron algún regalo?

JR: (Ríe) ¡Todavía no pero están todes a tiempo! O en realidad creo que el mejor regalo es haber logrado la constitución de la Asociación Civil. Ya estamos haciendo trámites de Afip y demás cuestiones formales para salir a buscar financiamiento

APU: ¿Tienen alguna meta en particular para este año?

JR: La meta principal es la de siempre. Asumir la responsabilidad de ser trabajadores de la palabra, difundir la literatura, promocionar la lectura y contagiar nuestra devoción. Más aún cuando el ámbito de la cultura y la educación están tan descuidados.