“Urquiza protagoniza una enorme traición”
APU (Por Juan Ciucci y Sebastián Russo): Queríamos hablar un poco sobre la serie que mañana empieza en la TVPública. ¿Cómo nace este proyecto?
Javier Trímboli: Este proyecto nace justamente en el Bicentenario, con la intención de seguir repasando la Historia Argentina. En algún sentido lo que el Bicentenario viene a mostrar es un interés, una nueva avidez por el pasado argentino, después de muchos años en donde se lo había abandonado. Nos pareció clave y central ir hacia una guerra como fue la Guerra de la Triple Alianza, la Guerra Guazú, la Guerra del Paraguay -tiene todos esos nombres- en la que mucho del destino que imaginaron nuestros padres fundadores, revolucionarios de la primera década revolucionaria -estoy pensando en San Martín, Belgrano- justamente en ese momento se vio truncado. El momento más crítico, más abismal de lo que fue la Historia Argentina, en tanto que llevó adelante desde Buenos Aires una guerra fraticida contra un Pueblo que hasta ese entonces había sido claramente un Pueblo hermano como el paraguayo. De alguna forma nos interesó mostrar una suerte de historia a contrapelo, donde en lugar de reflexionar sobre algún momento clarísimamente ético como pueden ser los que protagonizaron San Martín y Belgrano, mostrar uno de esos momentos más críticos.
APU: Quizás también uno de los más obscuros en nuestra historia. Porque muchas veces decimos que la Argentina no realizó guerras contra otros pueblos hermanos o que no participó de genocidios, como una expresión de la voluntad de nuestro Pueblo y sin embargo la Guerra del Paraguay tiene mucho de eso.
JT: Efectivamente, es uno de los puntos más obscuros, más complicados. Te diría también que en parte lo que entra en duda es eso que nombramos Argentina, cuando hablamos de la Guerra de Paraguay. En 1865 cuando se inicia la guerra, que en parte nosotros estamos discutiendo porque pensamos que puede situarse su inicio un poquito antes, en 1864, la Argentina como tal, está recién conformándose. En tanto que la Batalla de Pavón que había sucedido en 1861 había producido un hecho tan extraño como es la retirada de Urquiza del campo de batalla. Una suerte de imposición de Buenos Aires sobre el resto de las Provincias; como el caso de La Rioja con el Chacho Peñaloza, que lo vivieron como una suerte de invasión, que fue una invasión sobre ellas. .
Es una Argentina que está apenas zurcida como tal y al mismo tiempo, zurcida con la hegemonía, con la dirección cada vez más clara de Buenos Aires. No por nada durante la propia guerra hubo cantidad de levantamientos, algunos minúsculos, otros masivos de población real, población gaucha que se resistió a ir a la guerra. Los más interesantes de pensar, te voy a mencionar un par de nombres simplemente, en la provincia de Entre Ríos, los de Basualdo y de Toledo, interesantísimos levantamientos del año 1865. Fueron levantamientos que terminaron negando la autoridad de Urquiza, que hasta ese entonces era un caudillo federal que se había levantado más de una vez en contra de las pretensiones de Buenos Aires. En ese entonces ya quiere ser un aliado de Mitre y como tal, quiere contribuir a la Guerra contra el Paraguay. Anteriormente el Paraguay había sido su aliado, incluso, aliado de tradición, sin embargo ahí, Urquiza, protagoniza una enorme traición. Lo que sucede es que sus gauchos dos veces se le levantan en masa, en resistencia a esa guerra, lo que es notable bajo todo concepto. Por otra parte en el año 1866, 1867 los levantamientos en el norte del país, en la región de Cuyo, su caudillo fundamental por supuesto fue Felipe Varela.
APU: También hay una cuestión económica, José María Rosa remarca la cuestión de Urquiza y sus beneficios económicos en la guerra.
JT: La figura de Urquiza es notable porque si uno a veces piensa, algo contrafáctico, si hubiera podido pasar otra cosa en esa coyuntura, eso hubiera dependido probablemente de la posición de Urquiza. Aun habiendo sido derrotado en la Batalla de Pavón de 1861, o luego de no haber prestado ayuda al Chacho Peñaloza en 1862-1863. Contra todos los pronósticos en 1865 lejos de apoyar a Solano López en su pretensión de defender la legitimidad del gobierno de la fracción blanca en Uruguay, que eran los aliados de los federales en Argentina con el Paraguay, en lugar de frenar las pretensiones de Mitre de dominar la República Oriental aliado al Imperio del Brasil, Urquiza se alía con Mitre.
Urquiza, de haber tenido otra posición, probablemente esta historia hubiera sido otra o por lo menos se hubiera limitado lo que fue una ofensiva feroz del liberalismo en la región contra las culturas populares. Y en el caso del Paraguay con toda una situación política estatal que mucho tenía que ver con una sintonía de esas culturas populares. Ahí hay una cuestión clave y por supuesto como lo dice José M. Rosa, después de la Batalla de Pavón la carrera política de Urquiza queda truncada definitivamente, no así la carrera económica. Urquiza pasa a ser un importante empresario de la Provincia de Entre Ríos. Va a ser uno de los principales proveedores de los ejércitos en la guerra y al mismo tiempo va a tener acuerdos económicos muy importantes con el Imperio del Brasil.
