La absolución de Belén: la recompensa tras una larga lucha

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La absolución de Belén: la recompensa tras una larga lucha

28 Marzo 2017

Por Ludmila Sueiro

Hoy Belén está absuelta. La joven tucumana de 27 años había sido detenida en 2014 tras haber sufrido un aborto espontáneo. En el hospital provincial fue denunciada por sus médicos, violando su derecho a la confidencialidad. La Sala III de la Cámara Penal la condenó a ocho años de prisión por homicidio agravado por el vínculo, a pesar de no realizarle un examen de ADN del feto que los médicos daban por sentado que era de la joven. En 2016, Belén es liberada. “En consecuencia se deja sin efecto la sentencia impugnada, conforme a los alcances expresados en los considerandos, dictando la siguiente sustitutiva: absolver”, así cerró el calvario ayer la Corte Suprema de Justicia provincial por intermedio de su Sala en lo Civil y Penal.

“Tarda en llegar y al final hay recompensa”, cantaban en un dúo Mercedes Sosa y Cerati. Luego de tres años de lucha y movilización, el movimiento feminista argentino celebra la absolución de la joven tucumana que había sufrido una cadena de violencias, tanto en el hospital, de parte de la policía hasta llegar la justicia provincial.

El caso de Belén es la demostración del avance en materia de géneros que viene atravesando la sociedad argentina. Esta sentencia, no sólo en el caso concreto individual de la joven sino hablando de las mujeres en general, da cuenta de una problemática como el derecho al aborto que no es tomada en cuenta en la agenda de los medios hegemónicos.

Los casos de aborto en nuestros país siguen dependiendo de las buenas voluntades de las personas que forman parte de las instituciones de salud, de seguridad y judicial. El derecho al aborto legal, seguro y gratuito es una deuda que se cobra, no sólo dos años de prisión para una joven, sino la vida de miles de mujeres año a año.