Cárceles: "La reincidencia es del 50%, pero si acceden a estudios, del 3%"

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Cárceles: "La reincidencia es del 50%, pero si acceden a estudios, del 3%"

18 Febrero 2012

Entrevista a la Coordinadora de la Modalidad de Educación en Contextos de Encierro del Ministerio de Educación de la Nación, Lic. María Isabel Giacchino de Ribet.

¿En qué instituciones se desarrolla el Programa?

Hay tres grandes tipos de instituciones de encierro donde nosotros trabajamos: de jóvenes y adultos en cárceles, de jóvenes y adolescentes acusados de delitos en institutos de régimen cerrado –porque en los institutos de régimen abierto los internos salen y asisten a la escuela- y también de niños y niñas, jóvenes y adultos internados en centros de adicciones de tipo cerrado. La modalidad educativa en contextos de encierro está prevista para las personas que están privadas de su libertad y no pueden salir de las instituciones donde están albergadas.

¿Cuál es el nivel educativo de los reclusos al ingresar a la unidad penal?

Bueno, para empezar, el 70% de las personas que se encuentran en la cárcel tiene menos de 35 años. Solamente el 47% tiene el nivel primario completo. Otro dato terrible es que el 64% de los reclusos no tiene oficio ni profesión al momento de su detención. Pasa lo mismo con los chicos en los institutos: la mayoría son semianalfabetos, porque fueron dos o tres años al colegio y después tuvieron que dejar, y manejan apenas simplemente las operaciones básicas para la vida cotidiana. Por este motivo la educación debe comenzar desde la alfabetización.

¿Cuáles son los ejes en los que están trabajando?

Los tres ejes que nosotros estamos trabajando son: promover la igualdad en el acceso a la educación, con un énfasis muy fuerte en que todo el mundo pueda tener educación primaria y secundaria completa. Luego, que esa educación sea significativa, es decir, que sea de una educación de calidad, porque no basta sólo con dar clases, hay que ofrecer algo que sirva. Y calidad en estos contextos también significa formación para el trabajo. Hace un rato te decía que el 64% no tiene ni oficio ni profesión. Por eso una de las cosas que estamos haciendo y vamos a intensificar es la formación para el trabajo, para el que al salir de la internación o reclusión tengan un medio lícito para mantenerse.

¿De las materias que se dictan, cuáles son las que más les atraen o les gustan?

Todo lo que tenga que ver con la formación para el trabajo les interesa muchísimo porque saben que ahí está la clave para la salida, y de las carreras universitarias, fundamentalmente abogacía, para defender sus derechos, psicología, para entenderse un poco más ellos mismos, sociología, para ver qué le pasa a esta sociedad. Estamos ahora haciendo una propuesta de bibliotecología, porque faltan muchísimos bibliotecarios en el país. A raíz de que instalamos las bibliotecas abiertas para las escuelas de las cárceles, surgió el problema de que faltan bibliotecarios diplomados en el país. Hay bibliotecarios que se han formado por la experiencia de que uno le enseñó al otro, pero que no tienen ningún tipo de preparación. Entonces es muy buena opción, porque muchos quieren volver como bibliotecarios a la cárcel y ayudar.

Muchos de los que pasan por las escuelas de la cárcel se transforman en líderes comunitarios. Éste es un dato que no está estudiado y que es muy interesante. Toman conciencia a partir de su experiencia, porque todos esos compañeros de ellos están ahí encerrados y quieren ver de qué manera se puede ayudar a los más jóvenes para que no lleguen a ese punto. Entonces se transforman en líderes comunitarios y generan emprendimientos en sus barrios, por ejemplo  escuelitas de fútbol, talleres para los chicos. Es impresionante, y muchas veces lo hacen con la colaboración del voluntariado universitario, eso es fantástico. Por ejemplo en la Universidad de Cuyo el voluntariado trabaja de forma excelente, y juntos generan un emprendimiento que es importante para los pibes del barrio, para así poder sacarlos de la droga, alejarlos de la calle.

¿Cómo se observa la situación de los institutos de menores?

En los institutos de menores, como ya pasaron la edad del primario, no se puede dar el primario común y se debe dictar la primaria de adultos. Pero el secundario es el normal por la edad que tienen. Y solamente tienen secundario común los institutos de la Ciudad de Buenos Aires y la Provincia de Buenos Aires, en las demás provincias en los institutos de menores no hay nada, es terrible. Por eso es la prioridad para el año que viene.

¿Hay alguna estadística que marque si el nivel de reincidencia baja en los internos que han recibido educación?

El porcentaje promedio de reincidencia para los que pasan por la cárcel es de un 50%, pero para los que egresaron o estudiaron en la Universidad de la cárcel es del 3%. Esto está mostrando un dato muy fuerte.

La entrevista completa se puede leer en la revista digital Educación, Cultura y Participación Social Nº4  que se encuentra en www.fundaciondemocracia.org.ar