ENOJATE HERMANA: el libro de Malena Pichot

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ENOJATE HERMANA: el libro de Malena Pichot

22 Diciembre 2019

Por Agustín Pisani

 

A este mundo patriarcal, misógino, careta y sobre todo profundamente desigual, es al que combate también desde sus textos Malena Pichot. Saltó al mundo de la visibilidad masiva siendo una pionera de lo que ahora llaman youtubers o influencers. Además labura o laburó en radio, series, cine, teatro, publicó otro libro y en todos estos distintos dispositivos prevaleció su humor como arma. En clave de humor, su mirada aporta una perspectiva de género;  su tono es feminista. O sea, provocación, nivel punk. Esta es una notable aparición en manos de Ediciones Futurock. El libro es una joya que reúne una serie de textos publicados entre 2017 y 2019 en Página 12 (Las 12) y que además ofrece una suerte de detrás de escena de cada artículo.

Estética panfletaria

Ediciones Futurock, lanzó esta impresión que va de la mano con su propia identidad. La editorial, de corta pero intensa trayectoria, sigue los pasos de su mentora futurock.fm, porque busca una manera distinta de ser en el mercado. Una lógica otra de desarrollarse dentro de la industria cultural. Esta apuesta, este libro particular, también parece estar pensado como un manifiesto. Un editorial de la editorial. Puede pensarse como una columna fundamental sobre la cual se construye la estructura central de ediciones Futurock, que tiende a buscar una relación con quien escribe muy distinta a lo que proponen las editoriales comerciales o ya establecidas o dominantes del mercado. El punto de vista de la publicación, el mensaje, su hondo contenido, la estructura de pensar sobre lo pensado y la estética panfletaria conjugan una serie de atributos que destacan sobre las publicaciones de tiraje masivo. El modo de circulación es a través de la página web, donde se puede conseguir a un módico precio si formás parte de la comunidad Futurock.

El estado de polémica permanente que propone la obra es una invitación o provocación a que fluya la lectura. Una horda de textos frescos y urgentes dialogan con su pensar pasado, lo cual complejiza las interpretaciones. El libro se muestra en blanco y negro, mientras que por dentro se encuentran muchos matices. Literal, política y estéticamente trabajado, con una tipografía al estilo máquina de escribir, refuerza el sentido contestatario de la publicación.

El prólogo está hecho por la cofundadora de futurock.fm Julia Mengolini quien transita junto a Pichot un recorrido feminista mediático que, lejos de separarlas como el patriarcado manda; las hermana. El arte de tapa fue realizado por Manuel Archain y el diseño interior por Fernando Belvedere.

Construyendo desde la deconstrucción

La autora pone de manifiesto cómo su pensamiento va entregándole más perspectivas sobre lo escrito, por las repercusiones que tuvieron o por lo que conlleva el paso del tiempo. Es decir, suma a la foto una aclaración que revisa lo dicho y pone en juego las propias fluctuaciones de su pensamiento, pero también de un devenir social, en donde lo que era impensado, ahora puede ser real. No fue magia. Claramente el trabajo de muchísimas personas, entre ellas Malena, hicieron que por ejemplo, la palabra misoprostol llegue a la TV. Por ejemplo, Pichot cuenta alucinada cómo se regocija de ver a la multitud desvelada, cantando y más despierta que siempre para que salga la ley del aborto legal seguro y gratuito. Cosas que ella creía que iba a vivir de viejita. Pero no, la batalla es cultural y su trabajo junto al de muchísimas compañeras y hermanas hicieron que esta ola inunde las calles y las corporalidades de toda una nación. “No es la espuma del enojo, es la furia de la transformación” (la cita es de Bimbo).

 

En ojo sororo

Mostrar lo que se necesita esconder, lo que está naturalizado y que sólo conviene a unos pocos, casi siempre blancos sexagenarios, tiene un costo muy alto, que de una u otra manera se lo cobra la hegemonía. Pero, también un valor inconmensurables para las mayorías. El feminismo podría entenderse como la manifestación más clara de la búsqueda de justicia social o igualdad. En este plano de lucha, de trompear a lo establecido es que las páginas avanzan dando cuenta de que siempre hay algo más para notar. La realidad o la ficción mediática que nos muestran desde los medios es una inagotable fuente patriarcal de donde Malena toma su material.

Usa lo conocido, el star system, para visibilizar lo ignorado. Porque, ¿quién no sabe que hay desigualdad? Sin embargo decidimos ignorarla, ya sea por estar naturalizada o por conveniencia o por comodidad o por miedo o por lo que fuere. Pero cuando alguien pone el foco en esto, el camino se hace de ida. Malena va a discutir todo, incluso su propios textos. Enojate hermana es un compendio de escritos en estado de polémica permanente. Porque de eso se trata la obra, de pensar sobre lo pensado.

La loca de mierda vs el patriarcado

Malena Pichot es violenta. Sus modos le hacen mal al feminismo. Es una enana fascista. ¿Quién no escuchó hablar mal sobre Malena alguna vez? A ese ataque continuo responde Malena. Las consecuencias de decir son estas. Pero cuando el enemigo busca destruirla, Pichot, descansa en las palabras de sus enemistades. Es que el oír la discursividad con la que se quiere correr el eje de lo dicho es brutal. Necesitan ser obscenos y gritar para intentar tapar lo descubierto. En magia un ruido sólo se tapa con otro grande. Y si hay algo que necesitan es que Malena sea tomada por loca o por bruja o por violenta para no discutir sus argumentos, porque saben que contra su razonamiento no tienen chances. Ahí se puede ver el eje del libro, la constante búsqueda de compartir a viva letra lo que es y desarticular el cotillón del parecer. Todo esto queda clarísimo al ver el trailer de la publicación.

Si hay un perjudicado por este libro, ese, son los lugares comunes (adonde vamos o estamos la mayoría); porque claramente queda expuesto que el sentido común, es el menos común de los sentidos.

Desde la ironía o la sátira, sus textos terminan provocando seriamente un paradigma cultural, un modo de ver y de ser arraigado en la identidad de nuestro pueblo y que por naturalizados o por conveniencia hegemónica suelen estar invisibilizados. Quien osa destaparlos o señalarlos sufre sus consecuencias. La batalla es cultural y esta es la razón de la violencia de Malena. Desde todos los frentes posibles. Sin embargo, el formato libro parecería ser ideal para que la autora deje en claro y gráficamente el nivel de confusión instalado. Evidencia la estupidez compleja y se burla de aquello que intenta sin argumentos, sostener una sociedad inviable.

 

Alerta spoiler

El resultado de Enojate Hermana es brutal porque es un pasaje de ida. Para los que ya están de viaje, van a conocer nuevos paisajes y para los que nunca se subieron a mirar desde esta perspectiva, les aseguro que les será inevitable ignorar cosas que están bajo la alfombra. Es un gran regalo para el suegro, el tío, el cuñado (sí, tu cuñado) o para toda persona que quiera divertirse y ampliar su registro sobre la injusticia y la desigualdad social imperantes.

En un mundo donde a las mujeres les dicen: “calmate, no te lo tomes tan a pecho, sos melodramática, no exageres, no es para tanto, sos muy sensible, qué susceptible, bajá un cambio, etc, etc; Malena llama a la acción a través del enojo. Sobran razones para enfadarse y queda en evidencia que quienes llaman a relajar cuando hay algo injusto son los violentos. Invita a la respuesta concreta, a la reacción reactiva, a poner en crisis cierta impunidad,  a sumar confusión a quienes la tienen tan clara.

 

Para comprar el libro:

https://tienda.futurock.fm/articulo/enojate-hermana/