Cromañón: carta de una sobreviviente a propósito del cierre del Centro Ulloa

Cromañón: carta de una sobreviviente a propósito del cierre del Centro Ulloa

07 Abril 2016

Por Agustina Donato

Voy a contar un pedazo de historia personal a ver si sirve de algo.

Hace unos 6 o 7 años, tocando fondo, con la cabeza absolutamente destruida e imposibilitada de llevar una vida normal después de Cromañon, empecé a ir a un psicólogo. Me lo había recomendado otra sobreviviente a la que yo escuchaba mucho. Me dijo que él era diferente, y que era especialista en "estos temas". Fui incrédula, a la defensiva y sin expectativas. En ese entonces, no podía trabajar, no podía asumir ninguna obligación, todo lo que hacía me costaba un huevo, era inestable, caía en pozos depresivos, dormía con la luz prendida, y cosas que hasta me da vergüenza decir.

Nicolás me contuvo. Me guió. No solo me hizo seguir sino que me hizo querer seguir. Es el gran responsable de que mi vida siguiera adelante. Hoy soy una persona completamente distinta. Tuve 4 trabajos, me recibí, me fui a vivir sola y supere una infinidad de miedos y trabas y sobre todas las cosas me hice cargo de lo que me había pasado, primer paso para luego hacer algo con ello.

Nicolás además de mi psicólogo, es especialista en tragedias, violencia institucional y derechos humanos y un profesional muy reconocido. Naturalmente, por estas cosas, empezó a trabajar en el Centro Ulloa, un espacio creado por la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación para acompañar a las víctimas de estos sucesos.

El Centro Ulloa, con profesionales como Nicolás, fue el único lugar que a lo largo de 11 años le dio contención a los sobrevivientes de Cromañón y yo y muchos más podemos dar fe de eso.

El macrismo en la ciudad jamás reglamentó la ley de Reparación Integral para dar respuesta a las necesidades básicas de quienes atravesamos esto. Se suicidaron 17 sobrevivientes en ese lapso.

El macrismo en la Nación desmanteló completamente el centro Ulloa. Ni Nicolás, ni la inmensa mayoría de quienes trabajaban siguen ahí para darnos una mano y ayudarnos a seguir adelante, para evitar que no se suiciden más pibes por desidia de una tragedia que nunca termina. El Centro Ulloa está desmantelado, por decisión política del gobierno de Mauricio Macri.

Este es mi límite. Es mi límite de tolerancia al que "piensa distinto". El que legitima esto es un hijo de re mil puta, sin matices ni excepciones.