Bercovich: "Hay que sacarle la concesión a TBA"
Agencia Paco Urondo: Tu nota de hoy en BAE plantea una discusión a futuro, del esquema de subsidios que actualmente se lleva adelante.
Alejandro Bercovich: Se ponen en discusión pero se siguen pagando, porque fijate que en septiembre ya hubo muertos en el accidente con el tren que arrolló al colectivo en Flores. Pero TBA sigue operando no solamente el Mitre sino también el Sarmiento. Y el transporte de cargas, por lo que cobra subsidios millonarios.
Solamente en Enero recibió 2.500.000 de pesos por día, es lo que le dio el Ministerio de Planificación para operar el Mitre y el Sarmiento. Para este año tiene presupuestado por todo concepto 800.000.000 de pesos (incluido los subsidios al gasoil el combustible para sus colectivos). Son como un Ministerio pero sin que se controlen sus gastos, ni mucho menos las inversiones que hacen para mejorar el servicio.
APU: A esto se suma la denuncia que hoy planteabas, que usan esos subsidios para comprar dólares y hacer operaciones financieras.
AB: Es así, porque el agente financiero de los Cirigliano, la empresa que usan para pagos y para manejar la plata de las empresas, se llama Favicor, y aparece en los registros de compradores de dólares de 2007 y 2008, se puede buscar en Internet esto.
Y lo que me contaron desde bancos privados es que cada dos o tres meses, cuando recibía la plata de los subsidios, Cirigliano lo que hacía era depositar l plata en varios fondos comunes de inversión y en varios instrumentos financieros. De allí iba sacando la que necesitaba, pero mientras tanto le daban intereses.
Y bueno, uno puede decir que eso es lo que hacen todas las empresas para salvaguardar la plata de la inflación, pero su argumento es que la guardaban inmovilizada mientras no la necesitan. Y la verdad que necesitar la necesitaban todo el tiempo, porque si hubieran cumplido mínimamente con el plan previsto durante la privatización, habrían necesitado esa guita seguro. Pero la usaban solamente para pagar los sueldos, y cosas elementales. Y el resto se la quedaban.
APU: Cuando mencionas los controles, en la nota remarcas que en 2008 la Auditoría General de la Nación (AGN) alertó sobre los incumplimientos del plan de inversiones de TBA.
AB: Sí, eso es increíble, lo que pasa es que la AGN no es una repartición común del Estado, sino que es un organismo de control que conduce la oposición. Ahí esta Leandro Despouy, que hoy dijo en varios medios que van a presentar un nuevo informe sobre TBA la semana que viene, que ya están todos los elementos necesarios para quitarles la concesión a los Cirigliano, tanto en el Sarmiento como en el Mitre. Pero esto no es vinculante con lo que haga Schiavi, que viene con una trayectoria dilatada desde le macrismo, ahora en el kirchnerismo. Y que sigue con la estructura de Ricardo Jaime, que al margen de estar libre, tiene una causa penal abierta y no está en la cárcel porque el Juez Oyarbide no considera prueba suficiente un mail donde consta que recibía vuelos gratuitos del grupo Cirigliano.
Ni lo más elementa hacen para que creamos que los controles existen. Para darse cuenta sólo basta con tomarse un tren, pero hay gran hipocresía desde los medios, porque ninguno de ellos usan los medios públicos de transporte.
Lo que hay que escarbar un poco más es por qué no los controlan, y les permiten llevar esta guita a la bicicleta financiera, y quedarse con la diferencia. Hoy me contaban que pusieron todas las formaciones nuevas en el Sarmiento, con un descaro increíble después de lo de ayer.
Uno trata de no indignarse con lo de TBA pero es una barbaridad. Es un emporio que hicieron en pocos años. Tenían la línea 61 y 62 hace diez años, ahora tiene dos líneas de trenes, una fábrica de vagones de tren, una fábrica de chasis y carrocerías para buses, administraron Southern Windspor un año, tienen inversiones en India. Son un monopolio que creció a partir de a prebenda estatal.
Siempre se habla del acercamiento que tienen con el kirchnerismo, pero Macri les hizo los contracarriles de las avenidas, y en la mayoría de ellos circulan colectivos de la línea Plaza. Entonces es una maraña de lobby y poder, que en esta oportunidad se cobro la vida de 50 trabajadores, ni más ni menos.
APU: A partir de esta tragedia, desde sectores del kirchnerismo se está empezando a plantear que ya sería tiempo que esta concesión caiga.
AB: Ya era tiempo hace unos años, me parece que es tarde. Está bien lo que hizo el kirchnerismo en otras áreas, que se le pueden reconocer. De hecho, que viajen más trabajadores tiene que ver con que hay más trabajo. Pero el sistema de transporte argentino está peor que en nuestros momentos de crisis, y después de 8 años de crecimiento es un rasgo tercermundista tan pronunciado, el sufrimiento que representa utilizarlo, que no se condice con nuestro nivel de ingreso per cápita.
Y en eso la responsabilidad del kirchnerismo es inocultable. Igual que en el acceso a la vivienda, que haya hoy menos hogares con propietarios que hace 15 años tampoco refleja la realidad de lo que ha ocurrido con el empleo, con la economía. Ahí habría mucho más para profundizar.
APU: Sí a partir de los subsidios, tenemos una tarifa baja, que es un beneficio para las clases populares.
AB: Pero no es un beneficio, eso lo explica muy bien Susana Torrado, que es una socióloga especialista en población y trabajo. El subsidio al transporte es un subsidio a los empresarios, porque de esa manera disponen de la fuerza de trabajo de un modo más barato que si el boleto valiera 3 $. El viatico está incluido dentro del salario del trabajador porque es parte de su subsistencia.
Si uno lo mira así, se da cuenta porqué es tan barato, porque lo que importa es transportar a los trabajadores del modo más barato. No es un beneficio para los trabajadores, porque en general la mayor parte de los viajes es de la casa al trabajo, y la vuelta a la casa. Eso explica esta lógica que suma lo peor de lo público y lo peor de lo privado.
APU: Por último, qué te parece que hay que hacer a futuro.
AB: Me parece que hay que sacarle la concesión a TBA, indudablemente. Fijate que con el Roca, en 2007 por mucho menos que esto, con un incendio en la estación con la gente cansada de viajar pésimamente, le sacaron la concesión a Taselli que es vaciador.
Se la sacaron, pero se la dieron a la UGOFE, en donde también está Carigliano. Entonces también está la oportunidad que se lo saquen y hagan gatopardismo de vuelta, cambiar el nombre para que no cambie nada. Lo que hay que hacer es redefinir este esquema, que el Estado vuelva a hacerse cargo del trasporte, si siente que tiene capacidad operativa para hacerlo. O sino cambiar el esquema de privatización a medias donde el estado pone la plata y nadie controla a donde va, no tiene más futuro.