"Quieren tapar con operaciones judiciales una política que genera descontento"

Por Boris Katunaric y Eliana Verón

APU: ¿Cuál es la visión de La Cámpora sobre la reaparición de CFK?

Andrés Larroque: Cuando uno camina y recorre, percibe una gran expectativa de un conjunto muy importante de nuestro pueblo, de nuestra sociedad que, por supuesto, ve en Cristina un símbolo de un tiempo muy cercano donde las cosas eran bien distintas a lo que estamos viviendo.

Por un lado está la gran expectativa que generó su arribo a Aeroparque pero también todo lo que tiene que ver con esta injusticia alrededor de una situación absolutamente dispar. Hay en  batería de causas judiciales que no vienen de ahora sino de hace mucho tiempo y son parte de los arietes que tiene el poder en Argentina para desgastar a los movimientos populares. Se quiere tratar de horadar la imagen y el predicamento que puede tener Cristina como símbolo de un país muy cercano en el cual las cosas eran bien diferentes en el cual había oportunidades para las grandes mayorías. No sólo para los más humildes sino para el conjunto de la sociedad.

También, la expectativa, la tienen que tener aquellos que hoy conducen el país. A veces uno se pregunta qué es lo que están haciendo, a dónde creen que pueden ir tapando sus responsabilidades de gobernar. Creen que van a seguir tapando todo con discursos de pesada herencia, que ya todos sabemos que no es tal, o con procedimientos judiciales a simple efecto de ocultar una política económica que va generando descontento, mal estar, excluidos y escenas que no se veían hace mucho tiempo en Argentina y que, por otra parte, ahora nos enteramos que lo que también se busca es ocultar lo que era una de las banderas de la fuerza política que hoy está en el gobierno y que, evidentemente, muy lejos está de serlo porque siempre supimos que Mauricio era Macri y lo que significa esa familia para este país.

APU: ¿Cómo ve el tratamiento de los medios con respecto a los Panamá Papers? 

AL: Todos los medios internacionales están hablando de algo que es sumamente vergonzoso que tiene que ver con la implicancia del presidente en los Panamá Papers. Pareciera que en la Argentina, los grandes medios de comunicación, no se dan por aludidos y buscan la vía de escape en un trabajo de connivencia permanente con el partido judicial que inventan causas y falsas imputaciones que tienen por motivo distraer la atención de la sociedad en un modus operando que le conocemos desde hace muchos años y que no resuelven la problemática del día a día del hombre de a pie.

APU: Se está empezando a hablar de una fuerte caída en la imagen de Mauricio Macri...

AL: Ya se terminó la campaña electoral, ahora tienen que gobernar y hacerse cargo del país. Ahora, si tu modelo de país es inconfesable porque nadie puede salir a decir que su modelo político es drenar los recursos de un país para fugarlos a cuentas offshore. Esa es la realidad de la Argentina donde una familia fue beneficiada por la nacionalización de la deuda privada, uno de los grandes descalabros que puso de rodillas a nuestro país. En aquel equipo económico de 1982 estaba Carlos Melconián como presidente del Banco Nación. Hoy ves a Federico Sturzenegger que participó y está procesado por el megacanje. Hablamos de gente que ha participado de los grandes desfalcos de nuestra historia. Toda esta gente que sintetiza esa lógica de un país que se construye a espaldas de argentinos es la que gobierna y todavía se dan el lujo de operar, a través de sus mecanismos mediáticos o judiciales, para que la que tenga que estar presa sea Cristina. Lo cual es una locura porque si hay alguien que tiene que estar preso o si la justicia se tiene que ocupar de alguien es de Macri y de toda la lista que se puede seguir engrosando.

Además, la situación es dramática pero la verdad es que todavía no han terminado de desplegar todas las potencialidades negativas de este modelo.

APU: Es lo más preocupante...

AL: Este es el comienzo, decía Carlos Zaninni en una nota. Cuando ves la base doctrinaria de este modelo que ellos representan es que el sector privado tiene una mejor capacidad para la asignación de los recursos y por tanto va a generar más productividad, tienen una idea de que las cosas van a ser mejores en la teoría para justificar las cosas que hacen. Lo que se ha demostrado a lo largo de la historia es que es el Estado, en interacción con el sector privado, es el que tiene que tener un rol central. Ellos le quitan al Estado el rol dinamizador de la economía. Ahora, esos recursos del sector privado en vez de ir a generar puestos de trabajo terminan en cuentas offshore. Hay una ingeniería diseñada para que el sector privado sea mucho más eficaz, pero para fugar recursos...

Y son ellos mismos los que tratan de imponer, a través de sus medios y su poder judicial, el tema de la corrupción en el otro lugar, en el que se ha preocupado por las mayorías. Quieren invertir la lógica cuando durante toda la historia han sido ellos los corruptos. Generan un modelo que estafa al conjunto de nuestro pueblo, eso nunca ha sido noticia, no es ni lo va a ser porque son ellos los que manejan ese poder.

APU: ¿Cómo está analizando La Cámpora lo que está pasando en el PJ?

AL: Siempre es importante para nosotros todo lo que tiene que ver con los problemas de la gente. Esta semana se juega mucho más que la situación de alguien en particular sino que lo que están buscando es qué modelo de país se define hacia el futuro y, desde esa perspectiva, tiene que estar encarada la discusión del Partido Justicialista como cualquier otra discusión.

Cuando esos debates se dan con laguna mirada sesgada o muy coyunturalista no se está mirando todo lo que está en juego ni toda la potencialidad que tiene nuestro espacio. Quizá haya que esperar, se han prorrogado los plazos y sería bueno tener un tiempo más para hablar fundamentalmente con un pequeño grupo de dirigentes que, me parece, que están más preocupados por su posicionamiento que por pensar en que toda esta estructura tiene que estar en favor de la gente. Cuando se entienda que hay que poner estas herramientas de cara al conjunto de la sociedad que hoy la está pasando mal es cuando de mejor manera se van a resolver las discusiones.