Café no tan al paso

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Café no tan al paso

05 Junio 2022

Por Estefanía Denise

La ciudad de Buenos Aires ofrece una amplia gama de opciones culturales para todos los gustos: desde las formales visitas guiadas a presenciar las exposiciones vigentes en los museos, hasta ir a ver tocar una banda underground en un viejo galpón alojado en el típico barrio de San Telmo. Aunque durante estos años de pandemia se ha descubierto un nuevo fenómeno cultural que se manifiesta en los notables bares y cafés de la ciudad.

Los históricos bares han agrupado en sus comienzos a artistas ilustres e intelectuales provenientes principalmente del campo de la literatura que han abierto interesantes debates en el ambiente de arte. Actualmente, las nuevas generaciones comenzaron a incorporar como punto de encuentro las cafeterías de barrio lo cual implica que estas sean reivindicadas y cuenten con la presentación de artistas que las resignifica como espacios que se expanden más allá de ser un cotidiano “café al paso”.

Comúnmente, estos bares estaban dirigidos a un público mayor de edad, donde contaban con precios accesibles y una decoración bastante ambigua compuesta por carteles de publicidades de productos que ya dejaron de existir o banderines de equipos de fútbol. El nombre del lugar estaba escrito al mejor estilo de fileteado en la ventana del lugar, donde también se indican las especialidades de la casa.

La lectura de poesías, bandas y artistas invitados a tocar música en vivo y exposiciones de arte visual es lo que podemos encontrar en estos bares que se definen como bodegones y que empiezan a tomar la escena de barrios como Almagro, Barracas, San Telmo, Balvanera, entre otros.

Las cafeterías funcionan como un nexo que conecta diferentes generaciones en un mismo espacio. La página web Bar de Viejes mantiene vivo este vínculo, aportando un mapa interactivo (https://bardeviejes.com.ar) donde los jóvenes pueden conectarse con los eventos más recientes que acontecen en dichos cafetines.

Estamos ante la presencia de la toma de bares por parte de un público juvenil que logra apropiarse de estos espacios tradicionales para convocar a artistas emergentes y alternativos en la participación de actividades que permitan redimir a estos sitios históricos.