Marcha de la CGT: "Las expectativas con respecto al gobierno son muy pocas"

Por Boris Katunaric

APU: Está resuelta la movilización para el 7 de marzo. ¿Cuál es su visión al respecto?

Hernán Escudero: Todos los días nos vamos encontrando con un conflicto nuevo donde muchos trabajadores son despedidos. La suma es infinita en más de un año que va de gestión del gobierno de Mauricio Macri. Hay mucha preocupación, por eso la marcha que va a hacer el 7 de marzo la CGT tiene que ver con una mínima reacción. Tampoco es lo que los trabajadores esperamos, esperamos algo mucho más contundente, con mayor celeridad. Si uno mira hacia atrás, el 29 de abril de 2016, donde 400 mil trabajadores se juntaron en Paseo Colón, la idea fue que el gobierno notara que la CGT tomara las riendas en el tema; la verdad estamos muy demorados en frenar la política que tienen en contra de los trabajadores.

APU: Con respecto a los despidos, el acuerdo firmado por el gobierno y los empresarios en noviembre no se cumplió. El Ministro de Trabajo, Jorge Triaca, se quiso despegar del tema acusando a los empresarios de incumplirlo. ¿Cómo lo ven?

HE: Lo que vemos es un retraso desde el Estado, Estado que es juez y parte, es parte de los empresarios y también hace de Estado cuando debería estar del lado de los más débiles. Pareciera que el Estado es socio. Hoy había una reunión entre el Estado y banqueros en contra del sindicato de Bancarios por el convenio colectivo de trabajo; es lamentable que la Casa de Gobierno esté ocupada por los empresarios que sin ningún tipo de tapujos se reúnen para tratar de doblegar derechos y conquistas que han tenido. Vemos con mucha preocupación que no haya un diálogo sincero de parte del gobierno, creemos en el diálogo, pero en uno que sea fructífero. No en algo que escribo con la mano hoy y mañana lo borro con el codo.

APU: ¿Qué expectativas hay con respecto a la movilización?

HE: Uno nunca tiene que perder las esperanzas pero creo que es una etapa más propositiva del movimiento obrero, creo que no son momentos de reacción sino de propuestas. Hoy, como está la CGT y cada sector que lo conformamos, lo que tenemos que tener en claro es que la solución no va a venir por líneas de trabajo del gobierno nacional, ni provincial, ni de la Ciudad de Buenos Aires, ni incluso podemos pensar que hasta los gobernadores que hasta hace pocos meses bregaban por que los trabajadores en sus provincias estén bien. Hoy los Estados están pensando más en sus cuentas y en beneficiar a unos pocos.

Creo que ha llegado el momento de proposición del movimiento obrero, de tomar espacios, de ganar la calle y hay que hacerlo de cara a la sociedad, explicando que no hay una sociedad posible si no hay trabajo. Las expectativas con respecto al gobierno son muy pocas. Tengo más expectativa en que el empresariado no dé la espalda a los trabajadores y que se ponga más cerca, sobre todo el sector PyME, que en los últimos 15 años logró tener su fábrica pequeña.