"Nuestra intención no es frivolizar el tema, sino mostrarlo"

  • Imagen
  • Imagen
  • Imagen
  • Imagen

"Nuestra intención no es frivolizar el tema, sino mostrarlo"

19 Septiembre 2012

Por Enrique de la Calle

AGENCIA PACO URONDO: Se cumplieron seis años de la desaparición de Julio López. La revista Barcelona siempre abordó el tema de Julio López desde el humor. ¿Cómo pensaron encarar un tema tan denso desde el humor?

Ingrid Beck: Nosotros no lo vemos como humorístico. ¿Qué tenemos para decir sobre esto? Sobre Julio López lo que tenemos para decir desde el día 2 después de su desaparición es que lo están buscando mal y que no lo están buscando. Decimos eso mediante la parodia, que es la fórmula que elegimos y entendemos que nos sale bien. Tenemos una sección dedicada a qué se hizo en la semana o qué se hizo en la quincena.

Ahora tenemos una sección que se llama “Buenas noticias” donde destacamos los logros en la búsqueda de Julio López, hablamos también de Luciano Arruga y algún otro tema vinculado a este tipo de casos.

APU: Decías que ustedes no definen como humor ¿Se definen como periodismo?

IB: Sí, periodismo político. Barcelona es una revista política.

APU: Es una revista política pero con una mirada desde el humor. ¿Cómo entra a jugar el humor en la revista?

IB: Usamos algunos recursos, algunas herramientas del humor pero hacemos parodia, no hacemos chistes por eso digo que no nos identificamos con el humor. En relación a Julio López hemos hecho además de esa sección muchas tapas. Hemos puesto a Kirchner cuando era presidente, hemos puesto también a la Presidenta. Hicimos una tapa con Julio López y diciendo que el avión lo estuvo buscando en distintos lugares del mundo.

Después hicimos una tapa donde estaba J.J.López y Julio López, trabajamos eso y en ningún caso hay un chiste, más bien una piña me parece. Lo que intentamos o lo que elegimos hacer es molestar de alguna manera, jorobar, irritar provocar, me parece que pasa más por ahí que por el chiste. Hay gente que no se ríe, que le duele y que se indigna, genera muchas reacciones y me parece que mientras genere algo está bueno.

APU: Ustedes dicen que es una revista política con herramientas que provienen del humor. Abordar desde esa mirada temas tan densos como el de Julio López ¿Hay límites o no? ¿Hay riesgos de que se frivolice un tema así?

IB: El riesgo existe, hacemos nuestro trabajo y nuestra intención no es frivolizar los temas, sino todo lo contrario, ponerlo de manifiesto. En el caso de Julio López frivolizar el tema es lo que hacen los grandes medios, recordarlo sólo cuando se cumplen años de su desaparición. El resto del año Julio López no está, no existe en los medios, está desaparecido otra vez ¿No?

Eso es frivolizar un tema: omitirlo. Nosotros intentamos ponerlo en la agenda pública a través de nuestra revista. Creo que el riesgo tiene que ver con el profesionalismo. Nos parece que hacemos lo que tenemos que hacer de manera profesional y por supuesto que tenemos límites, somos personas honestas, con ética, así que esos límites los tenemos, tenemos límites ideológicos.

No tenemos límites para tratar los temas porque son los que circulan en la agenda pública, en la agenda de los medios. De eso tenemos que hablar, ahora, qué decimos es la pregunta. Ahí no pensamos en los límites, pensamos en lo que queremos decir. No lo estamos corriendo, no pasa por ahí la discusión.

APU: ¿Dentro de esas repercusiones del tema abordado por ustedes, tuvieron críticas en relación con lo de López?

IB: No recuerdo haber tenido críticas, sí gente que se escandaliza porque esto es muy doloroso, cómo reaccionarán los familiares. Si bien no tenemos un vínculo cercano con los familiares, sabemos que de alguna manera agradecen que tratemos el tema de Julio López todo el tiempo. Reconocen que somos el único medio que lo recuerda siempre. Estamos en libros que han hecho los familiares, hablamos con las abogadas, tenemos una relación directa con esa gente que es la que nos interesa, no es nuestra intención lastimarlos, no pasa por ahí. A mucha otra gente no le importa.

APU: ¿Te acordás cómo fueron esas reuniones de redacción para abordar el tema?

IB: No hubo reuniones para abordar el tema. Era un tema más de la agenda pública y empezamos a pensar qué hacíamos. En este momento no me acuerdo cómo surgió tratarlo, surgió simplemente como surgen muchas ideas. Así como la otra sección fija que dimos de baja sobre la nena de 11 años embarazada que no la habían dejado abortar.

Hacíamos, semana a semana, lo que le iba pasando a esa nena con su embarazo. Hay temas que se salen de la agenda pública y de alguna manera tenemos que darle tratamiento porque no puede ser que no estén -desde el lugar del periodismo- y elegimos tratarlo.