Piratas del arte: muchas identidades, una conquista

Por Carla Repetto

Bacalar, Quintana Roo. 2016.

Desde el 1600 en Bacalar desembarcaron piratas, expedicionistas, militares, holandeses, ingleses, escoceses, franceses, cubanos y hasta Pablo Escobar, pasando por artesanos, artistas callejeros, músicos y alquimistas del arte.
O al menos, lo intentaron.
Algunas personas entre sueños,
quizás el cielo con palabras
y hasta el agua siendo tan clara.

Bacalar tiene un magnetismo palpable, el tiempo transcurre lento, dicen que tiene los tiempos del abuelo. A veces, desde la incomodidad, otras, solo se siembran sobre la nada misma. Pero la percepción del tiempo es diferente. Se oye mucho la re-pregunta: ¿a las 15.00 mejicanas o a las del reloj?

En esta Semana Santa se pudieron ver a innumerables casas de arte, centros culturales, restaurantes y bares repletos de turistas, en su mayoría de Chetumal. Pero también hay un círculo, no tan pequeño, de hombres y mujeres que fueron reunidos por el festival del Galeón Pirata y que han venido a movilizar un poco esta tierra de nadie.

Muchos son argentinos que dejaron de serlo, mejicanos, chilenos, alemanes y franceses, que también han dejado de serlo. Los alquimistas del arte. Se convierten en una raza diferente.

Diferente

1 Que no es igual, no se parece.
2 De forma diferente.
3 Que son más de uno, que son varios.

En los principios de la alquimia se dice que los seres humanos estamos formados por partículas diminutas de oro y que por consiguiente, podemos materializarlo.Ya sea con nuestras manos, ojos, con nuestro cuerpo o simplemente con nuestras creaciones e ideas.

En un lugar como este, elegido por piratas para que nadie los moleste, hay como una búsqueda por conquistar el canto y el silencio. El sueño. Lo tridimensional y corpóreo. El tacto. Los niños.

El Galeón Pirata, que deviene de una ensalada de artistas de todo tipo, tiene sus puertas abiertas desde hace más de dos años. Adrian Tieso Herrera, Jaime Morales, Debi Simon y Jacobo Bukowski, son algunos de los nombres que se oyen por las colinas que bajan de las habitaciones y casas que están alrededor de este Centro Cultural.

Si bien en el Galeón no han faltado colchones, hamacas y habitaciones, el 2º Festival de Arte Independiente de Bacalar (FAIBAC), se hizo más a lo grande y montaron un escenario al aire libre a modo de cierre en donde se presentaron los chicos de Circo en Kombi, Alejandra y Francisco, Rebeca Lane y Nakury, de Guatemala y Costa Rica, Gabriel Palatchi Trío, Casa Verde Colectivo y DJ Nacho Frito.

Además, durante toda la semana también se hicieron charlas y otras presentaciones en vivo como Canciones Acrobáticas, “Libélula, vuelo en armonía” de Nazira Chejín, La Sonora Mezcalera, La Trucha Cabaré y pintura en vivo de Vicente Vivó.

Una parte muy importante de este festival también fueron los talleres para los niños que, a lo largo de toda la semana, tuvo a varios de los artistas mencionados ocupados por la mañana armando clases con introducción al cine, música, circo, teatro, danza y pintura.

No estará Johnny Depp, ni existirá un Peter Pan, definitivo: esto no tiene nada que ver con Disney, pero en una calle de doble mano con bulevares que recorre todo el margen de la laguna, al lado del Fuerte San Felipe, frente al Balneario Municipal, se reúne y se festeja la intención del arte.

A veces faltan manos, cabezas, ideas, más música y ganas. De estos festivales está lleno, pero solo pueden continuar si siguen desembarcando más y nuevos artistas con ganas de seguir creyendo en la alquimia de los seres humanos.

En Bacalar habrá uno, dos o más, que se hagan ver, que no les importe verdaderamente si existe peligro, si hay un fuerte, un barco o un pirata. Pero su refugio es la magia, que solo se genera cuando un par de ojos la ven.

Blog de Carla Repetto: carlabelenrepetto.tumblr.com