Marco Berger presenta “El Cazador”

Imagen

Marco Berger presenta “El Cazador”

28 Mayo 2020

Por Carolina Solís

En su debut en la pantalla grande, Juan Pablo Cestaro encarna el personaje de Ezequiel, un adolescente de 15 años, y un prematuro deseo sexual con hombres. En el período en que sus padres se encuentran de viaje conoce a “el Mono”, un skater de 21 años con quien se involucra e inicia una relación inmediatamente. El Mono oculta secretos oscuros que corromperán y pondrán en riesgo al adolescente. Ambos comparten un fin de semana juntos y es presentado a su primo mayor “El Chino”. Esto da comienzo a una constante atmósfera de suspenso, en donde el personaje principal deberá sortear sus principios y sus miedos al verse expuesto a las manipulaciones y chantaje de estos dos.

El director reconoce que esta temática se encuentra de moda en el contexto político-social actual. Manteniendo al margen que él fue ejecutando sus films desde 2007-2009 hasta la actualidad sobre temáticas de género. También señala un cambio de paradigma desde la aprobación y legalización del matrimonio igualitario. Sin intensiones de ser reconocido y encasillado, nos deja en claro que su creatividad está arraigada al abordaje de problemáticas inherentes del ser humano.

Escapando del cine mainstream, Marco Berger, guionista y director (galardonado por múltiples premios y reconocimientos en el exterior) se convierte en un máximo exponente del vine Queer, abordando en este largometraje temas que socialmente se encuentran solapados.

Haciendo hincapié y utilizando recursos similares a los que utilizó en sus films anteriores. Nos pone sobre la mesa cuestiones escabrosas, abriéndonos una invitación a reflexionar. Pronuncia escenas nocturnas en las que se logra el máximo de tensión, con un acertado equipo de dirección de fotografía y la impecable musicalización de Pedro Irusta.

Sin recurrir a escenas explicitas este thriller logra incomodar y generar muchos interrogantes en el espectador. Su equipo, con actores emergentes, funcionales y con entrega completa en sus personajes logra plasmar la vorágine del guion. Estéticamente tratados con mucho cuidado y respeto en su exposición. Una trama sólida, sórdida y psicológica que nos abre más preguntas que respuestas.