Crónica de viaje: Yucatán (abril, 2016)

  • Imagen

Crónica de viaje: Yucatán (abril, 2016)

17 Junio 2016

 

Por Carla Repetto

Abril, 2016. Yucatán.

Cuento los billetes y me dan ganas de llorar, con s y h, de shorar.

Me impacienta no llegar a lugares extraños. Sí, loco, me gusta ser la primera en todo; a esta altura, el año pasado las cosas ya eran distintas.

Se acerca el momento de pensar en sobrevivir y bueno, con lo que eso implica. Subsistir, subsistencia.

1. Hecho de subsistir una cosa o un ser vivo;

2. Conjunto de alimentos y de los medios necesarios para vivir.

Me pone un poco nerviosa volver a probarme en ese sentido. Buscar trabajo, otra vez, ¿volveré a ser simpática, a llevar bandejas?, de camarera o quizás en alguna recepción. Me gustaría dar clases de yoga, pero bueno, antes debería aprender más acerca del Yoga. O masajes, piedras calientes, cocina, de lo mío, simplemente ayudando en algo, soy buena en eso. Ayudando.

Lo único que me tiene en vela es eso, no saber qué va a pasar. Me divierte, claro, ahora que lo pienso, saber que puedo hacer que todo vibre según cómo elija moverme. Para eso tengo que dormir más. Está bien, Holbox me va a ayudar.

Vamos a una isla pequeña, allí dicen que se ven las constelaciones bien claritas, que hay mas estrellas, se ven Marte y Júpiter casi todas las noches, las calles son de arena, es barato y no sé que mas.

Anduvimos en Isla Mujeres, Cancún. Muchas gente. Fiesta de egresados. Bariloche. Fiesta a la noche, una playa abarrotada de gente porque las demás o son privadas o no tienen playa directamente. El agua, indiscutiblemente, es increíble, pero según el viento, la marea y no se qué tanto mas, el mar te avasalla o se olvida de vos.

Tranquilo y sin olas, claro o revuelto, picado oscuro o claro. Tiene el color del caribe más salvaje. Turquesa, celeste, verde o azul, depende de todo lo que enumeré recién.

De todo eso depende. Pero me veo los pies. Siempre los veo. Arena blanca, color manteca. Salado, no tanto como el de Tulum. No es playa abierta, un detalle no menor.

Tampoco es barato. Nada es barato en esa isla. Ni siquiera no dormir es barato. Todo sale caro. El cuerpo me está facturando esas cosas, creo que tengo que dejar de tomar alcohol. Sería una buena limpieza, eso y el pucho. No sé cómo voy a hacer. Me da rabia tener que llegar al punto de decir que tengo que hacerlo sin poder hacerlo de una y sin pensar. Débil. Debilidad. 2 Falta de fuerza o energía moral. Qué horror.

Blog de Carla Repetto: carlabelenrepetto.tumblr.com - Foto: Magalí Costa: magalicosta.tumblr.com