Grondona no murió: sigue el fútbol sin visitantes
Por Horacio Bustingorry
Arrancó un nuevo campeonato del fútbol argentino. Los principales títulos periodísticos hicieron hincapié en la derrota de Boca, el debut de Riquelme en la segunda categoría y el triunfo que se le escapó a River sobre la hora. Sin embargo, aunque haya pasado desapercibido, el dato central de la jornada fue la poca voluntad de los organismos de seguridad para terminar de una vez por todas con el cercenamiento de los derechos históricos de los hinchas argentinos.
Arrancó un nuevo campeonato sin visitantes. El posible regreso no pasó de ser sólo un rumor. Años de prohibiciones en el ascenso comienzan a hacerse (mala) costumbre en Primera. Cuesta entender que en un país donde tantos derechos fueron restituidos, donde tantas políticas reparatorias han sido implementadas, el fútbol continúe en un retroceso que parece no tener fin. Es el fútbol que Julio Grondona nos legó. La muñeca de quien fuera el mandamás de la AFA durante los últimos 35 años generó este esperpento que no da señales de haber perecido. Un fútbol para todos… los que se quedan en casa mirando la tele para ver lo que pasa.
Tal vez existan personajes felices con esta censura a la pasión. No es el caso de los amantes del tablón (borombombón) que, en este nuevo campeonato, volverán a padecer las restricciones ideadas por Don Julio, como si su último deseo hubiese sido privar de color las canchas argentinas. Esta postal relativiza la noticia que conmocionó a nuestro fútbol semanas atrás; por ahora, Grondona no murió.