Misiones: Previsión Social niega cobertura a una afiliada

  • Imagen

Misiones: Previsión Social niega cobertura a una afiliada

28 Enero 2014

Por Martín Sereno

La historia de Fabiana Gutiérrez (docente, carnet de afiliada al IPS nº 83.465) desnuda el aspecto más cruel de esta institución (Instituto de Previsión Social) y sus directivos,  quienes desobedeciendo lo mandado por leyes provinciales y nacionales y a pesar de los pedidos y reclamos efectuados por la titular y diversas fundaciones y letrados continúa negándole la cobertura que le corresponde dado su cuadro clínico-médico y su discapacidad.

Cuadro de situación

“Tengo problemas graves de salud, padezco de dos patologías (miastenia gravis y neuropatía autonómica) de origen neurológico que necesitan de un intensivo tratamiento farmacológico y de rehabilitación ´-toma más de 15 remedios diarios- y el IPS me lo viene negando sistemáticamente a pesar de que la legislación nacional y también la provincial los obligan a brindarme esa cobertura. Ellos argumentan que una regulación interna del organismo no autoriza la cobertura que me corresponde por ley” explicó Fabiana, “es un absurdo legal”.

Fabiana sabe de luchas, dada su condición clínica, muchas acciones que para el común de la cosa son simples o automáticas para ella demandan un gran esfuerzo, ha superado etapas donde ni siquiera podía caminar y se debía desplazar en silla de ruedas, ha tolerado dolores inconmensurables, ha necesitado 15 horas diarias de provisión de oxígeno; nunca bajó los brazos, con esa sonrisa que la caracteriza, siempre siguió adelante, igual que hoy.

“Yo soy docente y siempre que mis condiciones lo permitieron trabajé, y siempre aporté, ellos están pisoteando mis derechos como afiliada y mis derechos humanos. Llegaron a proponerme que renuncie a la obra social y que una vez fuera del sistema laboral me ponga a cargo de otra persona y que el ministerio de salud me dé cobertura, es decir, con esa maniobra me quieren expulsar del sistema laboral, me están diciendo vos no te recuperas más, vas a ser discapacitada para siempre, acá no te queremos, eso es discriminación” afirmó Fabiana.

Reiteradas negativas y sus consecuencias

Fabiana ha presentado varias notas y pedidos reclamando la cobertura y asistencia que por ley le corresponde, la negativa del IPS reitera siempre el mismo argumento, una reglamentación  o regulación interna, según ellos, los ampara para no brindar la cobertura y asistencia correspondiente.

Consultada acerca de cómo se siente y cómo repercute esta falta de cobertura respondió:
“Hasta el 2009 trabajé y ejercí como docente luego mis patologías se agravaron y no pude ejercer regularmente, esta falta de provisión de medicamentos y del proceso rehabilitativo necesario (por negación del IPS e imposibilidad, debido al alto costo, de adquirirlos en forma particular) me han traído un fuerte deterioro en la salud y se han agravado mis dolencias, actualmente tengo muy poca movilidad en las piernas, debilidad total en los brazos, he sufrido un cuadro de neumonía, y estoy padeciendo de incontinencia.”

“Siento indignación, angustia, incertidumbre, dolor, no estoy pudiendo cuidar como corresponde a mi hija, yo podría estar mejor pero el IPS me niega esa posibilidad, económicamente me es muy difícil también, yo he dejado de pagar las cuentas para poder comprar los remedios y así y todo no puedo comprarlos todos.”
Solidaridad

Durante años Fabiana peleó prácticamente sola “me cuesta mucho pedir, trato siempre de lograr las cosas por mí misma”, pero ahora casi agotada y al borde de la desesperación decidió difundir su problema “es increíble la reacción de la gente, más de 300 personas ya se han comunicado conmigo, el ´sábado en Oberá se va a llevar a cabo un festival una cruzada solidaria para colaborar conmigo, inclusive, una vez enteradas las autoridades provinciales de salud, inmediatamente se contactaron conmigo, se pusieron a disposición, ya me han conseguido una importante provisión de medicamentos y me garantizaron la continua provisión de los mismos y del transporte necesario para la rehabilitación (algo que también le era negado por el IPS), inclusive manifestaron sorpresa e indignación por la negativa del IPS y se comprometieron a tomar cartas en el asunto”.

La lucha que sigue

“Creo que arranca una nueva etapa en mi vida, por lo menos voy a acceder a lo que me corresponde y esto va a repercutir positivamente en mi salud y en mi estado anímico”, y concluyendo agregó “voy a luchar para que mi caso destrabe esa difusa reglamentación del IPS que no le permite a muchos afiliados acceder a los derechos que la ley les garantiza, voy a luchar para que no sólo yo sino todos los demás afiliados que estén en similares condiciones –y conozco varios casos actuales- sean atendidos como corresponde,  voy a dar batalla para que el IPS cumpla con la ley.”