Ciudad adhirió al Protocolo de Interrupción Legal del Embarazo

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Ciudad adhirió al Protocolo de Interrupción Legal del Embarazo

17 Julio 2020

Por Belén Ruíz Díaz | Foto Camila Alonso Suárez

Con 50 votos afirmativos, 7 negativos y 3 abstenciones, la Legislatura porteña aprobó en el día de ayer, la adhesión al protocolo nacional para la Interrupción Legal del Embarazo (ILE). Este proyecto de ley, que fue presentado por la Campaña por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito en febrero de este año y que contó con el apoyo de 42 de 60 diputados, se trató mediante una sesión mixta, con legisladores presentes en el recinto y otros con participación remota. Vía redes se convocó a un “twittazo” del hashtag #ProtocoloILEenCABA, para apoyar dicha aprobación.

Este protocolo nacional había sido derogado durante la presidencia de Mauricio Macri y fue restituido en diciembre del 2019 por el actual ministro de Salud, Ginés González García, y se basa en lo establecido por el Código Penal argentino de 1921: la interrupción del embarazo es legal cuando el mismo es fruto de una violación o implica riesgos de salud o de vida para la persona gestante. Antes de esto, la Ciudad contaba con un protocolo de aborto no punible, pero no estaba en vigencia ya que distintas organizaciones habían presentado ante la Justicia un amparo por considerarlo restrictivo.

A la hora de debatir, hubo varios discursos a favor y en contra del proyecto. El más resonante fue el de la legisladora del Frente de Todos, Ofelia Fernández: “La Campaña Nacional por el derecho al Aborto legal nos enseñó, con más de una década peleando, que incluso siendo pocas no pudieron doblegarnos, imagínense cuando nos multiplicamos”. Lucia Velasco, integrante del mismo bloque, aseguró también que en la Argentina cada 3 horas una menor de 15 años es madre y en un 90% se trata de un abuso intra familiar.

En tanto, el legislador del bloque Vamos Juntos, Guillermo González Heredia quien votó en contra, se refirió a la interrupción legal del embarazo como una “cultura del descarte” y agregó: “este protocolo conforma una sociedad que desalienta el compromiso, la solidaridad y los afectos, yo quiero una sociedad que defienda las dos vidas”. Siguiendo la misma línea, la legisladora Marilú González Estevarena expuso que “el protocolo existente atenta contra el derecho constitucional a la objeción de conciencia, vulnera el derecho a la información y, por lo tanto, la libertad para decidir de las mujeres embarazadas”.

Quienes también se manifestaron su rechazo fueron los integrantes del Arzobispado de Buenos Aires, mediante una carta firmada por el cardenal Mario Poli y los monseñores Enrique Eguía Seguí, Joaquín Sucunza, Alejandro Giorgi, Juan Carlos Ares, Gustavo Carrara, José María Baliña y Ernesto Giobando, entre otros. En la misiva, sostuvieron que no están en contra de los derechos de las mujeres, sino que “no es humano favorecer a un débil en contra de otro más débil”.

Más allá de los discursos en contra, la realidad es que esta adhesión es un avance en los derechos de las mujeres. La Ciudad de Buenos Aires acaba de dar un paso muy importante, luego de 100 años de silencio, y que haya sido mediante la unión de la mayoría de los bloques políticos, da cuenta de que la ILE era necesaria. La lucha ahora es seguir por este camino, buscando conquistar el aborto legal, seguro y gratuito.