La política española transita sus días entre el impacto de la pandemia, el resurgimiento de grupos de ultraderecha y un sector importante de la sociedad que se muestra indiferente. A la clase dirigente, y en especial a la coalición de gobierno, tocará tomar la iniciativa para impedir el triunfo del individualismo y proteger el futuro.
El Pueblo chileno determinará este domingo 25, mediante un referéndum, si aprueba un proceso de reforma de la Constitución que la democracia trasandina heredó forzosamente de la dictadura de Pinochet.
El pueblo boliviano votará este domingo, en los primeros comicios luego del golpe contra Evo Morales. El expresidente, exiliado en Argentina, no pudo ser candidato. Pero su partido, el MAS, es amplio favorito en las encuestas postulando a Luis Arce. La derecha se aglutinó detrás de la candidatura de Carlos Mesa, aunque se teme que desconozca el resultado en caso de una victoria del MAS.
La oposición chilena consiguió los votos necesarios para que frente al contexto de pandemia se autorice a trabajadores y trabajadoras un retiro parcial de fondos de la AFP, el sistema previsional privado impuesto por la dictadura pinochetista. Bajo presión de la opinión pública, acompañaron la decisión algunas bancas oficialistas. Resta la aprobación del Senado.
La desclasificación de informes de la CIA sobre acciones ilegales en la lucha contra la ETA, en los años 80, volvió a poner en discusión la figura del expresidente de Gobierno. Su primer efecto fue la tensión en la alianza actual entre el PSOE, que junto al PP y Vox impidió la apertura de una investigación, y Podemos. Queda por determinar por qué la información surge en este escenario de pandemia y en plena campaña preelectoral en el País Vasco.
Tras concretarse las segundas elecciones en pocos meses, el PSOE y Unidas Podemos parecen haber logrado un rápido acuerdo para formar un gobierno de centroizquierda en España. Aún deben negociar la abstención de los partidos catalanes y sortear sus propias limitaciones, que los han hecho perder votos y escaños de una rueda electoral a otra. El crecimiento de la ultraderecha constituye un nuevo desafío para el posible gobierno de la coalición.
Un manifiesto que ya ha reunido 7500 firmas de intelectuales, artistas y referentes políticos propone un “Plan B” para Europa. El diagnóstico que desarrolla plantea duros cuestionamientos hacia las instituciones de la UE. A fines de febrero próximo se concretará un encuentro en que se evaluarán propuestas para responder a las crisis sin ajuste ni restricciones de las garantías democráticas.
El sistema financiero global y sus organismos multilaterales tienden celadas al pueblo griego y pretenden que pague una vez más la crisis que ellos mismos generaron. La indiferencia prima en casi toda Europa. Un modelo frente a otro.