"Salvajes hombres de ojos tristes"

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"Salvajes hombres de ojos tristes"

05 Agosto 2012

AGENCIA PACO UONDO: Sos director de teatro, entrenador de actores, y actor por sobre todo. Tu formación más importante en Colombia es en la escuela.

Ernesto Martínez Correa: Sí, en la Academia Superior de Artes de Bogotá. Me recibí hace unos doce años, soy actor y se abren otras ramas como el entrenamiento de actores o la dirección teatral

APU: Te conocí en este entrenamiento que trajiste a la Argentina. Sos el primero en traer el método Suzuki.

EMC: El método de entrenamiento Suzuki ya lo trabajaba alguien acá, Mónica Viñao, que es directora de teatro, pero lo que es el método de entrenamiento sí, es nuevito aquí. Igualmente, el método en sí es nuevo, se viene desarrollando hace treinta años y en Latinoamérica somos muy pocos los que lo estamos dando, tres o cuatro personas nada más.

APU: Muy sintéticamente: ¿Cómo se podría definir?

EMC: Suzuki lo llama “la gramática del pie” porque él se pregunta por qué los actores y los seres humanos en general utilizan energía artificial, eléctrica, todo lo hacemos por botoncitos y ya casi no usamos la energía animal, entonces, él empieza a buscar ciertas posiciones muy de la tradición oriental, de sus “sentados” por ejemplo, que son muy diferentes a como se sientan los occidentales. Toma cosas de la danza balinesca y del budismo y hace un método a través del cual busca que el actor vuelva a trabajar desde su energía animal y no desde la artificial. Se la llama “la gramática del pie” porque tiene que ver con el contacto de la planta del pie sobre la tierra.

APU: ¿Cómo se articula este método que vos venís trabajando en Argentina hace un par de años, con la obra que está en escena la cual estás dirigiendo: “Salvajes hombres de ojos tristes”?

EMC: Con la directora española Lourdes Rodríguez Santaella empezamos a trabajar con los actores desde el entrenamiento Suzuki con el fin de que ellos tuvieran una gran presencia y una gran energía porque la obra amerita, de parte del actor, un compromiso absoluto puesto que la parte dramatúrgica es compleja y desde la puesta en escena también es compleja, entonces, lo primero que hacemos siempre que entramos en un montaje es entrenar a los actores en Suzuki, porque no sólo es lo que te dije sino también es un entrenamiento vocal.

Lo que se busca es unir al cuerpo con la voz y los trabajos que hemos puesto en escena, al actor le pedimos esas dos cosas, mucho cuerpo y mucho sonido.

APU: ¿Cómo es el argumento de la obra?

EMC: El argumento de la obra trata de un hombre que le tocaba parte del tren en un pueblo desolado y se encuentra con dos chicos que son los hermanos Flick. Poco a poco estos dos chicos lo van enredando a punta de verborrea y lo van manteniendo en ese sitio hasta que va pasando el tiempo y lo que pasa definitivamente no lo puedo contar.

APU: ¿Dónde está en escena?

EMC: “Salvaje hombre de ojos tristes” está en el centro cultural Pata de Ganso, eso es pasaje Zelaya 2132, todos los viernes a las 23 hs.

APU: ¿Cómo podemos hacer para leer un poco más sobre el entrenamiento que estás dirigiendo, ¿Dónde está tu trabajo? ¿Hay algún blog?

EMC: Sí, Tenemos sobre la obra el blog hombredeojostristesblogspot.com.ar y sobre el trabajo en Internet buscando Suzuki o buscando por mi nombre Ernesto Martínez Correa.

APU: Vos sos colombiano y viniste a hacer teatro en Argentina ¿Qué diferencias encontraste entre el teatro colombiano y el argentino?

EMC: La movilidad, Buenos Aires es la primera ciudad en el mundo en salas de teatro abiertas y en funcionamiento. Encontré una muy buena aceptación del público, de la gente en general y de los actores para hacer el teatro que en otros países latinoamericanos son mucho más difíciles. En Bogotá, recién hace unos 7 u 8 años empezó a desarrollarse un boom teatral y escénico pero, lógicamente, todavía estamos como en aguas frente a Buenos Aires. Eso fue lo que me atrapó muchísimo de quedarme acá un tiempo explorando y haciendo teatro.

APU: Sabés que leí en un suplemento cultural que Buenos Aires es la ciudad del mundo con mayor cantidad de asistentes. ¿Por qué crees que se da esto en Buenos Aires?

EMC: Creo que también se da el hecho que es una ciudad hecha de inmigrantes que traen toda su cultura, sus gustos, eso tiene mucho que ver. Colombia, que es una sociedad televisiva, de telenovela,  nosotros producimos mucha televisión y eso es todo lo contrario de acá. En Buenos Aires las telenovelas se producen muy poquito y creo que eso hace que el actor se interese más en el teatro, mientras que el actor colombiano cae en las garras de la televisión.

APU: ¿Decís que los colombianos son muy “telenoveleros”?

EMC: Sí. Absolutamente. Tenemos 30 ó 40 producciones al año.

APU: Eso es positivo por la inserción laboral. Acá como que la producción se da más en la publicidad también para el actor.

EMC: Sí, exactamente. Hay una diferencia muy grande con Argentina y es que, en Colombia, el actor casi nunca hace publicidad, la gente común hace casting y salen en publicidad. Acá es muy común y es como una regla que el actor haga publicidad, allá no. En el sentido laboral es una ventaja porque digamos que hay más tasa de trabajo para el actor de televisión allá, aunque tampoco es mucho porque igualmente se cierra en un círculo que da vueltas y vueltas.

Acá también hay mucho teatro comercial, la calle Corrientes es como un pequeño Broadway que, creo que no lo tiene ninguna capital latinoamericana, eso es una gran ventaja para el actor.