Rocambole: de Breccia a Goya
Por Boris Katunaric
En la tapa de Oktubre se pueden apreciar en fondo negro, sobre sombras blancas un montón de rostros que podríamos llamar populares, excluidos, trabajadores, etc. esta forma es muy recurrente en las obras de Rocambole y también en la de Alberto Breccia, recordaremos para comparar la famosa escena de Mort Cinder, con los árboles blancos y el fondo negro. Esta técnica que se acercaría en fotografía a un Negativo, no es casual, si bien los trazos son distintos, en este momento Breccia es más delineado y el de Rocambole mucho más pastoso. por lo menos en esta comparación, sabemos que Rocambole es dibujante y tiene el oficio de la historieta, Breccia como referencia a veces puede ser ineludible, lo que hace es homenajear o, más probablemente, adaptar un legado estético, al nuevo paradigma que abrió el viejo compañero de Oesterheld.
La permanencia del negro sin duda acompaña la estética predominante del disco, la oscuridad y la ofuscación de los personajes en rebelión, sumergidos en el horizonte plano encuentran un punto de fuga en las banderas rojas un poco alejadas del plano principal. El otro clásico gráfico de este disco es el hombre con las cadenas; tiene las venas cortadas y el interior del cuello es hueco, como si sólo tuviera algunos músculos y por dentro la nada, un cuello vacío y una expresión de esfuerzo y dolor y las encías rojas, también aquí el rojo está alejado del plano principal, pero es el trazo distintivo, el detalle no pasa desapercibido sino que centra el significado.
En Bang bang estás liquidado hay un detalle increíble. De perfil se puede ver un personaje (estimo es el mismo Rocambole) mirando el cuadro de Goya el tres de Mayo de 1808 intervenido por el dibujante, yo nos son soldados los que apuntan al hombre español, sino que son enfermeras con la insignia de la cruz roja ¿una antesala de fusilado por la cruz roja? ¿La vieja cultura frita, refritada, reinterpretada, revalorizada ante un espectador que sujeta un perro con un arma por hocico?
Sobre esto agrega el autor “Es un homenaje a Goya y su obra los fusilamientos del 3 de mayo, pero con un ejército de la Cruz Roja. En una biografía había leído que Goya vio los fusilamientos por la ventana y me pareció una imagen muy potente. Quise agregarle una persiana americana pero remitía a una música más fashion. En la reedición agregué otro cuadro mío: ahí se ve a un tipo matando de un tiro a otro con pinta de marino. Siempre me costó entender por qué durante la dictadura ningún padre calentón se tomó venganza de su hijo desaparecido y toda la lucha descansó en la figura maternal”.