Alejandro Guyot: milongas electrificadas para un tango del siglo XXI

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Alejandro Guyot: milongas electrificadas para un tango del siglo XXI

10 Enero 2021

Por Boris Katunaric

Por decisión del entrevistado, el artículo contiene lenguaje inclusivo.

Alejandro Guyot es cantor, letrista, compositor y poeta; es la voz de Bombay Bs As (ex 34 puñaladas) banda que integra la llamada " Nueva generación tanguera" siendo uno de los referentes indiscutidos de la renovación del género. AGENCIA PACO URONDO lo entrevista en el marco del lanzamiento de su primer trabajo discográfico solista.

 AGENCIA PACO URONDO: Por el laburo que venías haciendo con Bombay Buenos Aires, que son parte de esta generación de Tango del S. XXI, lo que me pasa al escucharlos a ambos es que siento que son búsquedas muy distintas. Bombay es muy orillero, muy de guitarras, más de los años 30. Con este disco me sucede todo lo contrario, me parece súper moderno, con otros recursos para la canción, con batería, con guitarras eléctricas, sintetizadores ¿cómo empezó esa búsqueda estéticamente tan distinta a Bombay?

Alejandro Guyot: Por un lado, Bombay Buenos Aires tiene toda una referencia a los conjuntos tradicionales de guitarra que fueron forjadores y acompañantes perfectos de los cantores y cantoras nacionales. Los que acompañaban a Gardel a Corsini a Nelly Omar. El desafío de Bombay siempre fue retomar esa tradición para recorrer el nuevo cancionero del tango del siglo XXI y buscar nuevas maneras de sonorizar, orquestar ese conjunto de guitarras. Nosotros lo llamamos ensayos porque era una manera de debutar profesionalmente en la escena tanguera, que también había que recomponerla a fines del siglo XX.

En este disco ocurre que la instrumentación que termino eligiendo tiene que ver con una larga relación que empezamos a desarrollar con Julio Martínez que es el productor artístico del disco, aunque rebalsa esa etiqueta. Empezamos en relación de profesor/alumno, venía a tomar clases de canto conmigo. En los intersticios de esas clases le contaba que tenía todo un repertorio armado de canciones que partían de ciertos bordoneos de milonga poco ortodoxos, que salían de la milonga campera más típica, pero que sí tenían el pulso de la milonga pero que derivaban a otras armonías y otras poéticas. Entonces Julio me propone ensayar algún tipo de producción: “Yo me vengo con los fierros” me dijo, y a partir de ahí empezamos a fantasear con la idea de, hacer un simple, o un EP, y cuando él me devolvió una primera maqueta yo dije: “No, ¿qué simple? ¡¿qué EP? Hagamos un disco” (risas), ahí Julio redobló la apuesta y empezamos a delinear una estética sonora de la que Julio Martínez es totalmente responsable. Y se fue armando una súper orquesta, respondió a todos mis caprichos y a todos mis pedidos, apareció la idea de invitar a Juan Pablo Fernández de Acorazado potemkin. Así se fueron electrificando las milongas. Lo que pasó es que fue arrimándose a este sonido que para mí tiene algo de atemporal, reúne todo tipo de influencias y gustos musicales que compartimos con Julio y también contiene un costado humano muy interesante. Juan Pablo me carga con que no me hice un disco, me hice un cumpleaños, están todos los amigos, y es verdad: porque está Pablo Jivo con el que compartí la primera etapa de la Orquesta típica El Arranque, Con Juan Pablo hemos recorrido, en la época de pequeña orquesta reincidentes, varios reductos de música urbana, mi admiración eterna a Fede Ghazarossian de Los Visitantes. Cuando lo conocí a Fede estaba cantando en el boliche de Roberto, viste que es re chiquito, y justo en la pausa entre un tema y otro lo veo y digo Ghazarossian, maestro, se pone medio colorado y me dice: “No, maestro usted, siga, siga” (risas). Poder incorporarlo acá fue un lujo.

APU: Has invitado a varias cantantes también.

A. G.: Si, Sofía Viola, Juli Lazo, Gabriela Massu, impresionante. Es un gran asado con amigues, un disco soñado, es un disco solista, pero por otro lado es “con una ayudita de los amigos”

APU: Podemos decir que es un gran asado rockero, justamente porque tenés a Juan Pablo y Fede de los Potemkin, además tiene mucha vitalidad y energía. Tiene una polenta y una suciedad si se quiere, que también es muy porteña, muy ciudadana.

AG: Totalmente, yo creo que Fede es el puente entre esos dos lenguajes. Mi voz es inevitablemente tanguera, canto el arroz con leche y sale tango, no hay chance. Pero Fede tocó en Don Cornelio, Me darás mil hijos, Acorazado Potemkin, también está la voz de Sofía Viola que latinoamericaniza un poco la cuestión, el fuelle de Julio Coviello que dice que la primera banda de rock que tuvo fue La Fernández Fierro, tanguerísimo, es como Pucho (risas). También está la cosa más jazzera con la incorporación de Esteban Sehinknam, Elbi Olala refuerza estos límites entre el tango y a música urbana. A mí me pasa que también está este pulso piazzoleano que se lo imprime Javier Estrella.

APU: Los que tocamos la batería en algún momento de nuestras vidas sabemos que ese chabón no es de este planeta.

A. G.: Pegamos un ondón con él. Vino a Buenos Aires a visitar a su padre, Miguel Ángel Estrella, nada menos. Le pregunté si se copaba a meter unas batas, fue así, nos metimos un día a una sala de ensayo, a los dos días nos metimos a estudio, grabó todas las batas que pudo y se fue. La rompió.

Lo que creo es que en este disco se trazan varias vertientes de lo que creo que es, o debería ser, la música popular argentina que no sólo incluye al tango y al folclore sino también al rock, la música urbana y al jazz local. Es una especie de reflexión persona de lo que fue y tendría que ser la canción popular argentina, tamizada por mi mirada y las asperezas de mi voz. Son canciones que nacen del pulso de la milonga y que van hacia otras zonas de la canción y son genuinas, sentidas y sinceras.

APU: Quería ir a la cuestión de las letras, me resultan muy interesantes, muy sentidas ¿cómo fue el trabajo como letrista de este disco?

A. G.: Hay una serie de canciones que yo venía acumulando, algunas estaban terminadas hacía rato, pero con otras me había encerrado en una estrofa o dos y no podía llegar a terminarlas, era una cosa…

APU: El bloqueo…

A. G.: Eso, no encontraba una salida, me estaba mordiendo la cola. Vi que Juan iba a hacer un taller de canciones y nos empezamos a juntar y gracias a ciertas lecturas y ciertas indicaciones en donde él me decía: “Che es por acá”. Por ejemplo, tenía : “Sangre negra de los corazones/sangre negra se derrama en mí/ sangre negra de las ilusiones/ gota a gota envenenando así” y no tenía más, se me cerraba, me queda como un haiku hermético. Y Juan me dice que le ponga zoom, que abra acá, que meta el zoom, que vaya a los detalles: “¿Qué pensás cuando estás cantando esto?” A mí se me cruzaba El jardín de las delicias de El Bosco, ahí empecé a encontrar cosas y a entender por dónde va. Se me apareció el “eclipse estático en el cielo” como algo insuperable, “una estrella a punto de morir”. Algo medio apocalíptico, y cuando apareció el perro con corona y cetro ya entendí. Se me vino una pintura que vi en Italia, una alegoría sobre el buen gobierno y lo que veía era la ciudad en llamas. Estoy hablando del macrismo. 

APU: Una de las imágenes más logradas de esa canción me parece es “hoy el diablo se afeitó el bigote”. No es el macrismo sino Macri mismo quien aparece.

A. G.: Se volvió una canción totalmente política pero con ciertas características, por un lado tendía hacia lo afroperuano, con algunas imágenes que evocaban lo virreinal y otra parte que tenía que ver con cierta cosa lisérgica, esa cosa entre Santana y chicha peruana, que la terminó materializando Darío Barozzi con la guitarra. Pero necesité es este espacio de laburo con Juan que me dijo “abrí el zoom, andá a máximo, al detalle”. Entonces la poética fue floreciendo bajo e aliciente y la palmadita en el hombro de Juan, que es un letrista y melodista increíble y le estoy totalmente agradecido. Si Julio fue el productor del disco, Juan hablo Fernández fue el padrino indiscutido de estas poéticas.

Este disco es muy difícil de ubicarlo en la batea de tango. Creo que tiene que ver con entrecruce de músicas y termina siendo una música urbana, creo que termina siendo mi visión de la música popular argentina, pero también hay guitarras eléctricas y sintetizadores, convivamos en esa indefinición también.

APU: Con respecto a futuro a corto o mediano plazo del disco ¿cuál quisieras que tenga?

AG: Ese es el desafío que se viene, cómo armar una banda que sostenga esto en vivo. Porque hacer coincidir en tiempo y espacio a un montón de músiques que viven en distintos lugares del planeta. En principio la idea era publicarlo, que se escuche, que ruede y después encontrar el grupo que pueda salir a defenderlo con todos los invitados que figuran en los créditos del disco, siempre y cuando puedan y si no poder hacerlo sonar igual. Es una buena pregunta pero que yo me la voy a poder empezar a responder a partir de entrado este año. Empieza un nuevo trabajo.

Ficha técnica

Alejandro Guyot (Voces en todos los temas y Guitarra clásica en 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7 y 10.)

Julio Martínez (Guitarra eléctrica en 1,2,4,6,7 y 8. Rhodes, Hammond, sintetizadores en todos los temas excepto en 10)

Juan Pablo Fernández (Guitarra eléctrica en 1, 4, 6 y 9, tiple colombiano en 3)

Elbi Olalla (Piano en 2, 4 y 7)

Fede Ghazarossian (Contrabajo en 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, y 10)

Sofía Viola (Voces en 3)

Julieta Laso (Voces en 5)

Mariana Mazú (Voces en 7)

Javier Estrella (Batería en 2, 3, 4, 6, y 10)

Pablo Sensottera (arreglo, guitarras y guitarrón en 8)

Darío Barozzi (Guitarra eléctrica en 3 y Guitarra clásica en 5 y 10)

Esteban Sehinkman (Rhodes, Hammond, piano y sintetizadores en 1, 3 y 4)

Pablo Jivotovschii (Arreglo de cuerdas, viola y violín en 3 y 4, piano, violín y sintetizadores en 11)

Julio Coviello (Bandoneón en 5)

Diego Aufiero (Guitarra eléctrica en 4)

Rosa Nolly (Saxo Barítono en 5)

Nicolas Delli Gatti (Batería en 1,5 y 7)

Track 9 con TANGOLEÓN:

Laurent Gehant (piano y arreglo para Tangoleón en 9)

Sophie Azambre le Roy (acordéon 9)

Manu Bosser (armónica, percusión informal 9)

Mathieu Barbances (contrabajo en 9)

En el Track 5 se puede escuchar un extracto sonoro del film “Los tres berretines” dirigida por Enrique Telémaco Susini, protagonizada por Luis Arata, Luis Sandrini y Luisa Vehil. Fue estrenada el 19 de mayo de 1933 en la sala Ástor de Buenos Aires. En el elenco participan importantes músicos de tango, como Aníbal Troilo y Osvaldo Fresedo. En este extracto el conjunto anunciado como Trío Foccile-Marafiotti estaba compuesto para la ocasión por José María Rizutti en el piano, Vicente Tagliacozzo en el violín y Aníbal Troilo en bandoneón, interpreta un fragmento del tango “Araca la cana” (E.Delfino/M.Rada).

 

Producción artística: Julio Martínez

Producción ejecutiva: Alejandro Guyot

 

Grabado por Julio Martínez en Chacarita, Buenos Aires, Argentina con excepción del piano tocado por Elbi Olalla grabado en Clot, Barcelona, España y la batería, grabada por Manquel en Underkatz Estudio, Buenos Aires. La participación de TangoLeón fue grabada en el estudio La Boîte À Meuh, en Saint-Aubun-des-Coudrais, Francia, por Fred Mateu.

 

Editado por Julio Martínez

Mezclado por Paco Arancibia

Masterizado por Eduardo Bergallo en Puro Mastering – Puro Revolver

Diseño: Vanina Steiner

Fotos: Florencia Osuna

 

Agradecimientos: A Florencia Osuna, a Julieta Blazina, a Diego Aufiero. A Mati. Nico, Luz y Christine.

Ale Brenner, Edgardo, Lucas, Juan, Maxi, Taffa, Gonzalo, Ale Bordas, Patri, Miriam, José, Gustavo.