"Le recomiendo a las víctimas de violencia de género que hablen"

"Le recomiendo a las víctimas de violencia de género que hablen"

21 Enero 2016

 

Agencia Paco Urondo: ¿Cómo se vivieron los diez días que Sol estuvo desaparecida?

Juan Ramón Carmelino: Te puedo contestar por mí ya que no vivo en Tres de Febrero ni cerca y no convivo con el entorno familiar así que prácticamente no hay trato. Soy Obrero de una Iglesia Evangélica y siempre confío de la protección de Dios y en ese marco, fuera cual fuera la situación de Sol, entendí que debía hacerme cargo para terminar con esa situación y ese descontrol.

APU: ¿Cuál fue la actitud de los vecinos, amigos y organizaciones sociales de Tres de Febrero?

JRC: Colaboradores y solidarios. La verdad es que no me detuve durante esos días en el barrio, me concentré en encontrarme con mi hija, constatar que estuviera sana y que tuviera sus cosas en orden pero sé que la comunidad de Tres de Febrero y las organizaciones se preocuparon, pusieron empeño y cada uno puso su granito de arena.

APU: ¿Cómo respondieron la Policía, la justicia y en especial, la Comisaría de la Mujer de Pablo Podestá?

JRC: Se movieron y respondieron dentro de la responsabilidad que le toca a cada uno. La denuncia estaba asentada en Capital y no en Provincia pero cuando me apersoné, fueron ellos (Comisaría de la Mujer de 3F) los que tomaron el teléfono y llamaron a la Comisaría 33 de C.A.B.A. para pedir información sobre el estado de la causa.

APU: ¿La otra parte de la familia estaba al tanto de la situación que llevó a Sol a tomar la decisión de ausentarse?

JRC: Él es un hombre violento y ejercía violencia sobre ella, lo cual consta en muchas denuncias. Me ha tocado verla escondida detrás de anteojos oscuros para ocultar los moretones por lo que registré denuncias en la Comisaría por violencia de género y había obtenido una restricción de hogar que luego fue levantada. También hay cierta complicidad de la madre ya que viviendo bajo el mismo techo no podía ignorar las circunstancias pero se hacía la sorprendida aunque sabía muy bien la situación que Sol, tras 14 años de hostigamiento, estaba viviendo y permitía que los chicos anduvieran todo el día por la calle.

APU: ¿Van a llevar adelante alguna acción legal contra el marido o por la tenencia de los hijos?

JRC: Esa es una pregunta que te la tiene que responder Sol. Yo me limito a la responsabilidad que me toca como padre, ella tiene 31 años y esa es una decisión que no la puedo tomar yo por ella.

APU: ¿Qué le recomendarías a otras mujeres víctimas de violencia de género?

JRC: Lo que les recomiendo a otras personas que estén pasando por esta situación es que no callen, que hablen, que no tengan miedo ya que hay gente que está dispuesta a colaborar en todo sentido, en la seguridad, en la contención, están ustedes, hay organismos. Son seres humanos y tienen derecho a una mejor calidad de vida.