La factura de servicios

La factura de servicios

21 Diciembre 2015

Por Santiago Gómez

Después que el gobierno de Mauricio Macri anunció que dejará caer el Memorándum con Irán el Grupo Clarín difundió una conversación editada entre el ex canciller Héctor Timerman, Guillermo Borger, ex titular de la AMIA y José Scaliter, entonces vicepresidente segundo de la entidad, del tiempo en que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner negociaba el acuerdo que permitiera que la causa avance a partir de la declaración indagatoria de los ciudadanos iraníes acusados. La grabación fue difundida por Radio Mitre, en el programa radial de los Wiñasco, para promocionar el libro del periodista de Clarín Daniel Santoro, sobre la muerte del ex fiscal Natalio Alberto Nisman. El audio prueba no sólo la irresponsabilidad de Timerman de mantener conversaciones relevantes por teléfono sino también el servicio prestado por las autoridades de AMIA a los servicios de inteligencia que responden a Israel y/o Estados Unidos. Durante la grabación se escucha a la autoridad de AMIA reconocer que los gobiernos kirchneristas fueron los únicos que trabajaron por el esclarecimiento del atentado.

Modus operandi

El accionar de los empleados de Clarín sigue el modus operandi de la denuncia presentada por Natalio Alberto Nisman  quien basó sus acusaciones en escuchas telefónicas y material periodístico para acusar a la entonces mandataria, el diputado Andrés Larroque y los dirigentes Luis D'Elia y Fernando Esteche, de buscar la inmunidad de los culpables del atentado. Así como mintió Nisman, Nicolás Wiñasco le mintió a los oyentes de Radio Mitre anunciando que pasarían un audio que probaba que Héctor Timerman sabía quiénes habían puesto la bomba a la AMIA, para inmediatamente preguntarle a Santoro, que lo acompañaba en el estudio, “¿cuánta gente murió en la AMIA?”, en una clara demostración de falta de respeto por las víctimas del atentado y de su falta de  profesionalismo. En ningún momento del audio se escucha al ex canciller decir que sabe quiénes pusieron la bomba.

En la grabación difundida se escucha a Timerman decirle al presidente de la AMIA que “Nisman no está en contra de lo que estoy haciendo, porque me dijo que estaba a favor cuando hace un tiempo lo consulté. Y aparte va a tener acuerdo del Congreso esto, si el Congreso no lo aprueba se cae. Eso también es verdad, más garantías no podemos dar”, y el ex presidente de la AMIA se lo reconoce, le responde “si señor”. Borger le pide a Timerman interrumpir la conversación para continuarla después y cuando corta se escucha que además de Scaliter hay una tercera persona que no participó del diálogo con el ex canciller. Durante los doce minutos difundidos queda claro que Scaliter le daba letra a Borger y que la posición de la mutual sería criticar y nada más. Es imposible no asociar la interrupción de la conversación de Borger, con la excusa de que le explotaba la cabeza, con las menciones que realizó Timerman a las interrupciones que hacían los iraníes durante la negociación, para pedir autorización a Teherán de las palabras que podían formar parte del documento firmado.

¿Reconoció que fueron los iraníes?

De la afirmación de Timerman no puede afirmarse que él supiera quiénes pusieron la bomba, mas bien parece un argumento para marcar las contradicciones del ex presidente de la AMIA que le decía que no negocie con los iraníes, que negocie con otros y Timerman argumentó “vos me decís que negocie con otro, pero si fuera otro no hubiera puesto la bomba”. Si Borger dice que fueron los iraníes los que pusieron la bomba para juzgar a los ocho iraníes acusados hay que negociar con los iraníes, pero si Borger dice que negocie con otro, si fuera otro entonces los iraníes no hubieran puesto la bomba. Sabrá el ex canciller por qué uso esas palabras, si fue para mostrar la contradicción en el argumento de Borger o si efectivamente cree que ciudadanos iraníes pusieron la bomba. Lo cierto es que la grabación permite escuchar a un irresponsable Timerman participando de una conversación telefónica en alto parlante sin saber quiénes estaban del otro lado de la línea, diciendo que llamó en “carácter de persona” que le dolía “como judío las críticas de la AMIA y que pareciera ser que lo mejor fuera no hacer nada para que la AMIA esté contenta”. Mientras el gobierno al que pertenecía negociaba con Irán, sabiendo de la oposición de los Estados Unidos e Israel y el trabajo de inteligencia de sus gobiernos, el ex canciller sin cuidado alguno daba por teléfonos sus apreciaciones sobre los iraníes a quienes los acusan.

Tras la divulgación del audio, Timerman retomó la actividad en las redes sociales, primero para preguntar “¿Guillermo Borger, presidente de la AMIA grababa las conversaciones en forma clandestina?”, a lo que se le podría responder ¿El canciller no podía citar al presidente de la AMIA a su despacho para decirle que no le creía nada a los iraníes? No puede pecar de inocente quien por orden de la ex Presidenta impidió el ingreso de equipos de comunicación, encriptación e intercepción de comunicaciones del ejército de los Estados Unidos, aunque para grabar la conversación diundida no hiciera falta más que un celular. También compartió en las redes sociales la carta de su renuncia para probar adoración y fidelidad a Cristina Fernández. Cabe recordar que la ex mandataria, en su carácter de legisladora, participó de la comisión que siguió la investigación para encontrar a los responsables del atentado a la mutual y siempre planteó sus críticas, señalando la intromisión de servicios de inteligencia extranjeros que desembocaron en la acusación a Irán como responsable.

Volvieron con las acusaciones

Como señaló Cristina Fernádez el caso AMIA forma parte de “un tablero de ajedrez de política nacional e internacional”, ya que las consecuencias de la firma del Memorándum con Irán produjeron, no solo el cambio de posición de AMIA respecto a la valoración de lo hecho por el gobierno kirchnerista, sino también el apartamiento de Stiusso de la Secretaría de Inteligencia, la acusación presentada por Nisman basada en afirmaciones periodísticas, que cuesta creer que él la haya escrito cuando se comparan con otros documentos de su producción; la muerte del fiscal, la creación de la Agencia Federal de Inteligencia y el traspaso de la Dirección de Observaciones Judiciales (OJ) órgano encargado de escuchas al Ministerio Público Fiscal. En cuanto Cristina Fernández deja el mandato, Macri deja caer el Memorándum votado por el Congreso de la Nación, le quiere sacar la OJ al Ministerio Público Fiscal y pasarla a la Corte Suprema, Clarín vuelve a poner el caso en agenda y el argumento principal es que “Timerman reconoció que Irán fue quien puso la bomba, entonces lo que decían Nisman, Israel y Estados Unidos era cierto”.

La difusión del audio prueba que intentarán procesar a Cristina Fernández de Kirchner  sobre la base de las acusaciones que realizó Nisman, que Mauricio Macri obedece a las indicaciones de los Estados Unidos y que funcionarios de primera línea no han cumplido con las medidas mínimas de seguridad para garantizar la confidencialidad de sus comunicaciones. Restará esperar cuántos audios más difundirán. Stiusso y sus patrones empezaron a cobrar.  
 

El fragmento del diálogo, editado por Clarín, entre Timerman y Borger en que se basó Nicolás Wiñasco para decir que el ex canciller sabía quienes pusieron la bomba es el siguiente:

GB: (…) ustedes quieran mantener en Ginebra y ojalá tengan éxito, pero nosotros estamos invalidando la figura de Irán

HT: ¿Con quién querés que negocie, Guillermo, con Suiza?

GB: Yo quiero que negocien con quienes ustedes consideren. Yo no puedo decir que Irán es bueno

HT: Decime “nosotros creemos que no es correcto negociar con Irán”

GB: Yo no voy a decir eso, voy a decir que Irán es mentiroso, es no creíble y negacionista

HT: Pero no tenemos otro con quién negociar, porque sino negocio con Estados Unidos la entrega de los iraníes.

GB: Yo entiendo que es difícil esta definición

HT: No me pongás en carga a mí diciendo este negocia con Irán que son una manga de mentirosos, bueno, decime con quién querés que negocie

GB: Yo entiendo, ojalá que pudieras negociar con otros, qué se yo

HT: Pero si fuera otro no hubieran puesto la bomba, entonces volvemos a lo mismo. Entonces yo te pregunto algo, vos decís que son eso, está bien, yo coincido con vos, son todo lo que vos decís. ¿Tenés otro para negociar?

GB: No, entiendo que no, pero este es un tipo citado por la justicia.

HT: El canciller no está citado por la justicia.

GB: El canciller de Irán.

HT: No está citado por la justicia

GB: No, no, el país, estoy hablando de la figura.

HT: El país tampoco está citado por la justicia. Están citados por la justicia ocho personas que fueron miembros o son miembros del gobierno. No te digo que no, pero no tengo otra persona para negociar.

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