Una elección con nuevas perspectivas

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Una elección con nuevas perspectivas

16 Agosto 2013

Por Juan Ciucci l Uno de los datos más significativos que han dejado las PASO fue la importante presencia en las urnas de un sector con fuerte accionar militante, pero generalmente relegado en las opciones del votante: la izquierda. Utilizamos este genérico para aglomerar un conjunto de opciones que se definen como tributarias del pensamiento procedente de la ésta cultura política en nuestro país.

Estos resultados cuestionan un discurso trillado sobre la capacidad de representación que este sector tiene en nuestra sociedad, mención recurrente en los discursos mediáticos que reflejan conflictos populares. En nuestra democracia, el lugar de los partidos políticos se define en las elecciones, y pareciera que no tanto ya en las luchas que organizan o acompañan. “Si se presentan a elecciones (quienes cortan una ruta, realizan un paro o una marcha) no los acompaña nadie”, se escucha decir.

Efectivamente, esta pasión por las elecciones y el Poder Legislativo que las diversas opciones de izquierda han demostrado en estas PASO (cómo mencionamos en otro artículo) han encontrado una respuesta importante en el electorado.

El dato más significativo es sin dudas el 3, 85% de los votos en todo el país que ha cosechado el Frente de Izquierda y de los Trabajadores. Sus miembros la definen como la elección más importante de la izquierda en nuestro país, en especial por los números que se registraron en diversas provincias: Salta 11.2%, Jujuy 9.39%, Mendoza 7.61%, Santa Cruz 7.86%, Neuquén 6.7%, Río Negro 6.3%, Córdoba 5.6%, Capital Federal 4.2%, Buenos Aires 3.95%.

Es ésta la segunda elección que encuentra reunidos al Partido Obrero, al Partido de los Trabajadores Socialistas y la Izquierda Socialista. En gran parte deudor del piso que impuso las PASO, este frente se posiciona como la principal referencia de izquierda, con altas chances para lograr una banca en el Congreso.

Una labor consecuente y militante puede explicar parte de este apoyo recibido en las urnas, además de la visibilidad que estas fuerzas políticas encuentran en su participación en diversas luchas en todo el país. Son ejemplo de ello la presencia lograda en fábricas, donde articulan las demandas de jóvenes trabajadores que comienzan su experiencia laboral y gremial; como las constantes denuncias contra las políticas de tercerización (de las empresas y de los diversos Estados) y su histórica presencia en la vida universitaria.

Este frente, inscripto en históricas tradiciones políticas y partidarias, parece con estos resultados verificar aquel viejo axioma de la “unidad de las izquierdas”. Si bien las tres fuerzas que componen este frente tienen prácticas y planteos ideológicos divergentes, saber sobrellevar esas diferencias y concretar un programa de unidad parece ser su mejor opción en el horizonte cercano. Tarea para nada sencilla, y que deberá encontrar una faz productiva para no ser un mero agrupamiento coyuntural. Reclamos comunes los unen, dependerá de cómo puedan vehiculizar esa potencialidad.

Autonomistas y Populares

Otro dato importante ha sido la muy buena elección que realizaron en Capital Federal (espacio donde históricamente estas fuerzas han logrado consolidarse) Autodeterminación y Libertad (3.3%) y Camino Popular (2.17%).

El caso de Zamora con AyL fue más sorprendente, dado que su gran elección no aparecía reflejada ni en la discusión mediática ni en las encuestas conocidas. Este espacio parece especialmente referenciado en la personalidad de este histórico dirigente de izquierda, con una trayectoria y un reconocimiento amplio en la Capital.

Otro es el caso de Camino Popular, una propuesta que intenta sustentarse en las opciones de novedad y cambio, tanto de las políticas de los partidos mayoritarios como de los partidos de izquierda. Con la participación de Lozano (desprendido de otras uniones), grupos culturales y universitarios, este “salto a la política grande” fue sumamente auspicioso.

Con un programa menos claro que el del FIT y advocaciones de voluntad que cuesta emparentar con acciones políticas concretas, estos espacios son aun una incógnita, cuando no se los emparenta con proyectos que han tenido una existencia efímera. Su mayor aporte será establecer una agenda distinta a las del kirchnerismo y del conglomerado mediático, que permita posicionarse a sectores sociales que han visto relegadas sus demandas. Su duración y accionar permitirá corroborar o no esa esperanza, que han sabido comunicar a un amplio sector de los ciudadanos capitalinos.