Argentina Trabaja: Una realidad que avanza, por Daniel Kaminszczik

Argentina Trabaja: Una realidad que avanza, por Daniel Kaminszczik

29 Febrero 2012

Desde sus comienzos, allá por fines del 2009, el Programa Argentina Trabaja demostró ser una herramienta más que eficiente para la inclusión social de cientos de miles de compatriotas que el sistema, en manos de la brutalidad neoliberal durante décadas, había dejado afuera de todo.

Más allá de lo que significó en lo económico para los cooperativistas y para los barrios, donde el repunte de la actividad comercial fue más que notorio, el Programa trajo aparejados otros efectos aún más importantes en lo que a la dignidad humana se refiere.

La recuperación de la autoestima y la ruptura con el aparato clientelar parasitario al que ya no había que tributar para acceder a un “plan” siempre en riesgo según la voluntad del puntero de turno, se hicieron visibles de inmediato.

Poco a poco, la convivencia diaria y la concreción de proyectos en equipo desarrollaron nuevos lazos de solidaridad, primer paso indispensable para la reconstrucción del tejido social  que décadas de opresión y exclusión habían destrozado y comenzaron a vislumbrarse señales de organización popular cuyo fluir imprimió una nueva dinámica a la relación entre gobernantes y gobernados.

La participación en los modulos de Saneamiento Urbano, Mantenimiento de Edificios Públicos,  Mejoramiento de Vivienda, etc. generaron en los cooperativistas la conciencia de que el Estado somos todos y del lugar que cada uno ocupa en la trama de este Proyecto Nacional y Popular.

El paisaje del conurbano bonaerense se modificó sensiblemente  y reaparecieron las sonrisas en los espacios públicos.

El segundo año trajo consigo la respuesta del Gobierno Nacional al siguiente paso en la restitución de derechos.

Primero la formación universitaria de los Orientadores y los programas de terminalidad educativa (FINES, COA) y luego el módulo de salud, en el cual se capacita permanentemente un Promotor por cooperativa para el seguimiento sanitario, no sólo del asociado sino de todo su nucleo familiar y para reforzar las tareas de prevención de los Municipios participando activamente en operativos “casa por casa”.

Paralelamente, los módulos se ampliaron a la reconstruccion de clubes de barrio y a la reparación y ampliación de escuelas y jardines de infantes de sociedades de fomento aumentando aún más el impacto social del Programa.

Hoy, el Gobierno Nacional redobló la apuesta.

En un acto en la Casa Rosada, la Ministra de Desarrollo Social de la Nación, anunció un ambicioso plan de obras que incluyen, entre otras, 11.200 Km. de cloacas y agua corriente y la creación de talleres para la producción de insumos necesarios para dichas obras lo que configura un gran paso adelante en el avance de Argentina Trabaja que ahora intervendrá en proyectos de mayor envergadura ligados directamente al mejoramiento de la calidad de vida de los sectores más vulnerables.

Esto irá acompañado por la aplicación de incentivos a la productividad y el presentismo que llevarán, a partir de Abril, el ingreso social de $1.200 a un máximo de $1.750, suma que aliviará  la situación de atraso salarial de los trabajadores cooperativistas.

Más allá de la crítica malintencionada, más allá de los palos en la rueda, más allá de toda prédica gorila, Argentina Trabaja sigue abriendo puertas a la inclusión social y a la restitución de derechos en el marco de este Proyecto Nacional que, nacido de la mano de Nestor y Cristina y levantando las banderas históricas de nuestro Movimiento Nacional, ha retomado el rumbo hacia la grandeza de la Patria y la felicidad del Pueblo argentino.