Humor: el columnista de Derecha contra el fallo de la Corte Suprema

Luego de tomar un cafecito en un reconocido bar del barrio porteño de Recoleta, con mi querida amiga y colega Cynthia Hotton, después de largas horas de charla y reflexión (más de una vez debí secarle con una servilleta sus lágrimas que caían de sus ojos) llegamos a la conclusión que la pena de muerte ha legado a la Argentina.

Una mujer, siendo víctima de una violación, está habilitada para abortar, casi sin ningun debate, otro atropello. Lamentablemente, como viene pasando en el país estos últimos ocho años ( era "K" ), el castigo no es presisamente para el violador, es para el mas débil ( que en este caso no sería Clarín, como diría mi amigo y colega Ernesto Tenembaum); en esta ocasión, es el niño por nacer, que no puede defenderse, elegir, decidir, sólo quiere VIVIR.

Es ineceptable que no se respeten los derechos del niño.

Para que pensemos todos juntos, ya que como siempre digo mi función como intelectual es pensar y ayudarlos a reflexionar a ustedes, con Cyn creemos que este es un problema cultural. Como religiosos que somos (como la mayoría de los argentinos por otra parte) sabemos que siempre van a existir Dios y el Diablo: por eso hay que enseñarles a nuestras niñas a no vestir tan provocativamente, logrando asi no tentar tanto a las almas que estan poseídas por el mal. Ni más ni menos lo que toda la sociedad reclama. PREVENCIÓN.

No al aborto, SI a la VIDA.