Catamarca: reprimen pedido de justicia por un joven asesinado por la policía
Por Santiago Haber Ahumada
En el día de ayer (22) la policía de Catamarca reprimió la manifestación que se realizó frente a la Casa de Gobierno para pedir justicia por el asesinato de Diego Pachao, asesinado por la policía provincial. Alejandro Pachao, padre del joven asesinado manifestó en diálogo con APU que los efectivos de la policía golpearon a sus hijas, a profesoras, y a Claudia, madre de Diego.
La policía llegó a la plaza del centro catamarqueño para quitar la bandera que la familia de Diego cuelga en cada concentración. Es importante destacar que el pedido de justicia fue pacífico, hasta que llegaron los efectivos policiales. Después de forcejear y golpear a los manifestantes, los uniformados les arrebataron la bandera y secuestraron las remeras de los familiares con la foto de Diego.
Claudia Veliz y Eduardo Argañaraz, referente del Partido Obrero Catamarca, fueron llevados a la fuerza al interior de la Casa de Gobierno por la policía. Argañaraz denunció que los efectivos policiales le arrebataron su teléfono celular, con la intención de borrar los documentos fílmicos que había registrado.
El padre de Diego, anunció que se hará una nueva concentración en la Plaza 25 de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, el martes 29 de diciembre a las 9hs.
El caso Pachao
Diego Pachao (20) murió el 14 de marzo de 2012 en el hospital San Juan Bautista tras haber sido arrestado durante 15 horas en la Comisaría 7ma de San Fernando del Valle de Catamarca. Ingresó al hospital en estado de coma irreversible, a causa de los golpes de los efectivos antes de detenerlo y en la comisaría.
La policía detuvo a Diego en la mañana del domingo 11 de marzo, en la Avenida Los Legisladores, después que Pachao le rogara a los policías que dejaran de golpear a su amigo, Mario González, que estaba en el piso recibiendo una golpiza de los efectivos.
Diego habría logrado guardar su celular y una vez en el calabozo intentó contactar a su madre. Al ser descubierto, los policías lo castigaron ferozmente, según cuentan los testigos que compartieron el calabozo con Diego y escucharon cómo lo golpeaban.
Según el informe médico, Diego ingresó a la Comisaría 7ma por sus propios medios y lo retiraron en ambulancia, convulsionando, después de haber estado tirado en el patio de la comisaría, vomitando sangre y sufriendo al calor del sol durante horas.
Los familiares de Diego no quieren que el caso se eleve a juicio sin antes hacer un cambio de carátula, que solicitaron como querellantes, porque los efectivos acusados están imputados por vejaciones e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Los fiscales de la causa se rehúsan a cambiar la carátula, evidenciando y profundizando su complicidad y el encubrimiento de los efectivos de la Policía de Catamarca. Según los padres de Pachao hay pruebas suficientes para que la carátula sea la del delito de tortura seguido de muerte, agravado por la calidad de agentes de las fuerzas policiales que ostentaban los imputados.
