Pshatakis, Levi y Avruj: ¿A quién le importa la vida de los sobrevivientes de Cromañón?

Pshatakis, Levi y Avruj: ¿A quién le importa la vida de los sobrevivientes de Cromañón?

27 Abril 2016

Por Rodrigo Lugones

La situación por la que hoy atraviesan los sobrevivientes y familiares de Cromañón gracias a los manejos de las autoridades del Centro Ulloa (Centro encargado de coordinar las políticas públicas de asistencia y contención a las víctimas), no solo es alarmante sino, más bien, preocupante.

Hace un mes, la vida y la salud de los damnificados dependen de la decisión política de la Directora Nacional  de Atención a Grupos de Vulnerabilidad, la licenciada Jimena Pshatakis, del Director del Centro Ulloa, Tomas Levi, y de Claudio Avruj, de la Secretaria de Derechos Humanos.

El 31 de marzo pasado fueron despedidos profesionales que se desempeñaban en el programa de atención a víctimas y sobrevivientes de la tragedia. Dos psicólogas, una trabajadora social y una psiquiatra fueron echadas del Ministerio de Salud, mientras que una psicóloga fue despedida del Centro Ulloa por el Ministerio de Justicia y DDHH.

Estos despidos significaron la interrupción en los tratamientos psicológicos de las víctimas de Cromañón. Cabe recordar que el convenio de atención surgió luego del fallecimiento del sobreviviente Martin Cisneros, en donde quedó expuesta, en su máxima expresión, la falta de contención por parte del GCBA y el evidente incumplimiento de la ley 4.786. La situación motivó a un grupo de sobrevivientes nucleados en la "Coordinadora Cromañón" a acercarse a las autoridades nacionales para elevar el reclamo pertinente.

Más de 50 personas se atendían en el Centro Ulloa. Son ellos y ellas quienes reclaman poder continuar sus tratamientos con sus terapeutas, exigiendo la reincorporación de los profesionales despedidos. Es importante destacar que en tan sólo un año se sextuplicó la cantidad de pacientes atendidos en el Centro Ulloa en comparación a la atención que brinda el GCBA a través del marco que garantiza la ley 4786. 

Los sobrevivientes y familiares, el año pasado, encontraron un poco de luz en el camino con la firma del convenio nacional, el cual no solo busca dar contención psicológica, sino que promueve el armado de redes de Salud conjuntamente con Hospitales Nacionales, Hospitales Provinciales y Municipales, con el fin de descentralizar la oferta en salud al grupo vulnerado, buscando una comunicación clara y referentes regionales con la coordinación del Centro Ulloa, permitiendo brindar un mayor acceso a la salud tanto en Ciudad Autónoma de Bs As., como en el Conurbano y el interior del país

Lamentablemente, en la reunión que llevaron adelante las víctimas de Cromañón con Pshatakis y Levi, no obtuvieron respuesta alguna en cuanto a la continuidad de los tratamientos ni la reincorporación de profesionales.

Consultados por AGENCIA PACO URONDO, desde la "Coordinadora Cromañón" aseguraron que “Lamentamos profundamente después de tanto tiempo de no poder irnos acostar con la luz apagada, tener que volver a prenderla, volver a transitar la falta de aire, y un sinfín de sensaciones horribles por esta inentendible decisión política de elegir dejarnos sin tratamiento psicológico. En Cromañón convivieron la corrupción y la desidia. A 11 años la desidia se llevó la vida de, al menos, 17 sobrevivientes.”